El mundo lucha contra las bolsas plásticas
Cada vez más países promueven leyes para combatir el uso irracional de las bolsas plásticas. Estas no solo contaminan los océanos: provocan graves daños a los animales, tapan desagües y tardan siglos en degradarse.
Uso restringido
El Senado de Uruguay aprobó una ley que limita el uso de las bolsas plásticas que no sean biodegradables. El objetivo es disminuir el número de bolsas que se usan en el país, que alcanzan a 1.200 millones por año. El comercio cobrará por entregar estos adminículos, excepto cuando se utilicen para llevar leche, fiambres, frutas, verduras y carnes.
Ruanda, a la vanguardia
Desde 2008 Ruanda lucha contra las bolsas, que están prohibidas en el país. Esto, porque su presencia impide que el agua de lluvia penetre en la tierra y, además, una parte importante del ganado fallecía por ingerir plástico. La restricción es dura y las penas de cárcel por ingresar bolsas al país llega hasta los 6 meses. "Son tan malas como las drogas", dijo un guardia ruandés a New York Times.
Chile: 200 bolsas per cápita al año
Cada chileno usaba, al año, 200 bolsas de plástico. Pero eso se acabó. Hasta febrero de 2019, los comercios podrán entregar hasta 2 bolsas por usuario. Terminado ese plazo, la prohibición de uso será total. Este cambio supondrá una revolución en la vida de los chilenos. "Por un minuto de uso (de la bolsa), la naturaleza sufre el efecto por más de 400 años", dijo el presidente Sebastián Piñera.
Miles de millones de bolsas chinas
Tres mil millones de bolsas plásticas por día usaban los ciudadanos chinos, una cantidad mostruosa que a partir del 1 de junio de 2018 debería haber comenzado a bajar ostensiblemente. Esto, porque los comercios tienen prohibido desde esa fecha entregar de forma gratuita bolsas de ese material a sus clientes. El Gobierno animó a los ciudadanos a usar bolsas de tela y otras alternativas reciclables.
África va un paso adelante
Por el grave perjuicio que provocan al medio ambiente, 20 países africanos decidieron prohibir las bolsas de plástico. No solo se las comen los animales, sino que tapan los desagües y causan todo tipo de estropicios. Por ejemplo en Mauritania, el 80% de las vacas sacrificadas tenían plástico en sus estómagos. Sudáfrica, Uganda, Togo, Chad y Ghana están en el grupo de países que dieron este paso.
En Alemania se paga
Desde el 1 de julio de 2016, los comercios alemanes comenzaron paulatinamente a cobrar por la entrega de las bolsas de plástico, como una forma de desincentivar su uso y promover las bolsas de tela. El objetivo de las autoridades es pasar de usar las actuales 71 bolsas por habitante anuales a 40 en el año 2025.
Los australianos se deben acostumbrar
Desde el 1 de julio en casi todos los estados de Australia están prohibidas las bolsas del plástico que se entregan en el comercio. Por eso, los supermercados están ofreciendo una alternativa reutilizable a un precio muy módico. Aunque inicialmente esto causó malestar en los consumidores (hubo casos de agresiones en algunas grandes tiendas), poco a poco estos se acostumbran a la nueva realidad.