El Gobierno español se desmarca del caso Rato
17 de abril de 2015La vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría, afirmó hoy (17.04.2015) que el caso se enmarca en el "ámbito privado" y que el Gobierno no tiene previsto dar explicaciones más allá de una comparecencia el martes del director de la Agencia Tributaria en el Congreso. Asimismo, aseguró que las instituciones públicas demostraron que funcionan, en un momento delicado para las dos grandes formaciones políticas tradicionales, PP y Partido Socialista (PSOE), que podrían sufrir en las urnas la indignación de la ciudadanía ante los diversos escándalos políticos y financieros.
Por su parte, el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, agregó que "da igual la pertenencia a un partido o no, el relieve social o el relieve político o el poder político o económico que uno se atribuya. Todos somos iguales ante la ley y eso es algo que tiene que preservar y hacer cumplir un Gobierno". Montoro, que trabajó a las órdenes de Rato cuando este era ministro de Economía, explicó que la investigación ordenada por la Fiscalía de Madrid por los presuntos delitos de lavado de dinero, fraude fiscal y ocultamiento de bienes, tiene que ver con su patrimonio en el extranjero.
Rato niega las acusaciones
En declaraciones al diario El País, Rodrigo Rato aseguró que no tiene sociedades en paraísos fiscales, ni en un ningún país de fuera de la Unión Europea y descartó también haber desviado dinero a las Islas Vírgenes, como apuntaron algunas informaciones publicadas. "No tengo nada ahí. La única relación que tengo con este paraíso es que trabajo con un abogado británico que tiene uno de sus despachos en Islas Vírgenes, pero yo con este despacho tengo una sociedad dentro del Reino Unido", manifestó al rotativo español.
La denuncia de la fiscalía precipitó el jueves sendos registros en el domicilio y la oficina de Rato, que fueron transmitidos casi en directo por las televisiones en medio de un gran frenesí mediático, en el enésimo escándalo que afecta a la clase política española. Tras pasar varias horas detenido, fue puesto en libertad. Este viernes, Rato volvió a estar varias horas en su oficina, en el céntrico y exclusivo barrio madrileño de Salamanca, mientras agentes de la Agencia Tributaria, que ejercen como policía judicial, investigan su patrimonio. El caso Rato vuelve una vez más a despertar la indignación en España, donde existe una gran crispación ciudadana por la proliferación de casos de corrupción en las altas esferas.
MS (Reuters/dpa)