Hasta hace tan solo seis meses, en Finlandia se consideraba tabú hablar siquiera de poner fin a la neutralidad militar. La invasión rusa de Ucrania no solo ha sacudido esta convicción nacional, sino que la ha invertido: tres cuartas partes de los finlandeses quieren entrar en la OTAN. Ilpo Pohjola es el jefe de la Asociación de Reservistas de Finlandia y celebra que su país quiera entrar en la OTAN. En su opinión, Rusia, que ya asaltó Finlandia en una ocasión, nunca ha sido de fiar. Vili Nurmi es objetor de conciencia y cree que entrar en la OTAN es un gran error. Presta servicio civil en Helsinki y organiza manifestaciones contra la OTAN, a la que acusa de belicista. Ilpo Pohjola y Vili Nurmi representan las diferencias irreconciliables entre los dos lados. Mientras el ex soldado de 60 años está satisfecho, el joven de 20 años vive los peores meses de su vida pacifista. El reportaje analiza el cambio radical en la orientación de la política de seguridad del país, pero también la minoría pacifista y joven, que rechaza cualquier tipo de violencia.