El FC Bayern triunfó gracias al espíritu de equipo

Fue una final ajustada la del FC Bayern y el Paris Saint-Germain, y también muy emocionante, porque las defensas de ambos equipos mostraron sus debilidades en cuanto el juego fue directo y tomó velocidad. También porque, la mayoría de las veces, las defensas reaccionaron con demasiado nerviosismo, y porque los pases eran bastante imprecisos. Esta no fue la mejor jornada para ninguno de los dos rivales debido a la gran presión de querer ganar sí o sí la Liga de Campeones. Pero, principalmente, porque tanto el FC Bayern como el PSG, actualmente los dos mejores equipos de fútbol de Europa, estaban al mismo nivel táctico y de rendimiento.

Manuel Neuer, otra vez con nivel internacional

Pronto quedó claro que esta no sería una fiesta de gala para el Bayern, como lo fue el histórico 8-2 en cuartos de final contra el FC Barcelona. Y tampoco, según transcurría el partido, un triunfo por varios goles, como el 3-0 en la semifinal contra el Olympique Lyon. Al final, un centro perfecto de Joshua Kimmich y un cabezazo igual de genial de Kingsley Coman definieron el 1-0. Y además, en el arco del Bayern estaba Manuel Neuer, que logró frenar una vez más todos los tiros peligrosos que acechaban su meta, demostrando su nivel internacional.

Nueva primavera para los viejos héroes

Así, el Bayern Múnich se coronó campeón del fútbol europeo por sexta vez. Después de tres éxitos en la Copa de Europa, los bávaros triunfaron ahora por tercera vez en la Champions League, con lo cual también lograron por segunda vez, luego de 2013, el histórico triplete. Los paralelos saltan a la vista: como lo hizo hace siete años Jupp Heynckes, el actual técnico, Hansi Flick, pudo volver a inyectar espíritu de equipo al Bayern y sacar de cada jugador el máximo de rendimiento.

Incluso “viejos héroes”, como Thomas Müller y Jerome Boateng, separados del equipo por el entrenador del once alemán, Joachim Löw, revivieron sus mejores tiempos, y el delantero Robert Lewandowski incluso jugó la mejor temporada de su carrera. También brillaron jugadores de la nueva generación, como Serge Gnabry, Joshua Kimmich y Alphonso Davies.

Pero, en realidad, no es correcto resaltar a jugadores individuales de este equipo. El Bayern fue el primer club en ganar todos los partidos de la temporada de la Champions League, desde el primer grupo hasta la final. Eso lo dice todo. “Se necesita juego de equipo”, dijo el entrenador, Hansi Flick, antes del pitido inicial. Y justamente eso es lo que hizo su equipo. Fue un triunfo colectivo, el del mejor equipo del fútbol europeo actual.

(cp/ers)

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