El arte del beso

Todos hemos visto esas películas clásicas de Hollywood, que simplemente no estarían completas sin un final feliz y un beso falso como broche de oro. El Papa reparte besos para otorgar bendiciones, y si uno se pasea por las viejas calles de Viena, es probable que todavía vea besar levemente la mano, como una forma elegante de saludar a una dama. Hasta los chimpancés y los bonobos son conocidos por besarse en los labios.

Un beso puede adoptar varios significados y formas. Sin embargo, aunque este ritual sea aparentemente tan común y a menudo placentero, el significado de un beso difiere según la cultura. Hoy, el "Día Internacional del beso" nos da oportunidad de reflexionar sobre este fenómeno tan curioso.

Mientras que el beso "apasionado" entre dos amantes, como lo hemos cultivado con el tiempo, podría ser comparado con los comportamientos que expresan afecto en el reino animal - como una madre pájaro alimentando a sus pequeños con su pico, o dos elefantes enlazando sus trompas - el beso “romantico” pertenece al repertorio biológico de los seres humanos. Los muchos receptores sensoriales ocultos en los labios y la lengua hacen que se convierta en una experiencia excitante. Además es una clara muestra de intimidad e incluso puede servir como un criterio a la hora de elegir la pareja "ideal". Sin embargo, su práctica no es igual en todo el mundo. En varios países, como Vietnam y China, besarse en público por lo general está mal visto. Los cónyuges no se besan fuera de la casa, y ni delante de los niños.

Diferencias culturales existen sobre todo respecto a los besos entre amigos o como forma de saludarse. En países como los EE.UU. o Australia, los abrazos suelen ser más habituales que los besos y en las culturas musulmanas solo es apropiado besar a alguien del mismo género. Los hombres se besan en la mejilla como saludo, mientras que el contacto físico entre hombres y mujeres no es ampliamente aceptado. En algunas países, dos hombres pueden saludarse con un beso en la boca. En Francia, uno puede recibir desde dos hasta seis besos como saludo, aunque por general no es un beso real, sino un delicado roce de las mejillas acompañado de ruidos simulando besos. En los Países Bajos se supone que el tercer beso en la mejilla trae buena suerte.

Si todo esto los ha confundido y de pronto se encuentran en una situación que requiere besos, prueben el inocente y divertido beso-esquimal, basado en una versión libre de un saludo tradicional inuit, llamado "Kunik". Para hacerlo solo tienen que rozar suavemente las puntas de sus narices una y otra vez. Los besos esquimales se ejecutan mejor con los ojos cerrados.

Feliz Día Internacional del Beso 2016.