EE.UU. y Afganistán en disputa por liberación de presuntos terroristas
10 de enero de 2014Estados Unidos aseguró que hay indicios de que tienen conexiones con actividades terroristas. La parte afgana afirma sin embargo que no hay pruebas de ello. Los hombres en cuestión se encuentran retenidos en la prisión de la base estadounidense de Bagram, cuyo control fue traspasado por Washington a los afganos tras una larga disputa.
El portavoz presidencial afgano, Aimal Faisi, aseguró hoy que una investigación de los 72 presos por parte del servicio secreto afgano NDS demostró que no había pruebas de "actividades terroristas o vínculos con los talibanes". "Se les reconoció su inocencia y serán liberados pronto", aseguró Faisi.
Mientras tanto continúa también el conflicto por la negativa del presidente afgano, Hamid Karzai, a firmar el acuerdo para el despliegue de una nueva misión estadounidense tras la retirada de las tropas de combate a finales de 2014.
Problemas para sucesor Karzai
Los expertos temen que Afganistán entre en el caos si en efecto se retiran todos los soldados extranjeros. Karzai quiere dejar el asunto a su sucesor, que será elegido en abril, pero Estados Unidos considera que eso es demasiado tarde y exige que se firme en las próximas semanas. Si eso no ocurre "habrá una retirada apresurada y caótica", publica hoy "The Washington Post" en base a documentos diplomáticos. También quedará en suspenso la ayuda civil.
Los planes originales preveían la permanencia de entre 8.000 y 10.000 soldados estadounidenses después de 2014, sobre todo para tareas de formación. En el acuerdo que Karzai se niega a firmar se establece entre otros la inmunidad de estas tropas ante la justicia local.
A todo ello se sumó un incidente en la provincia de Helmand, donde según las autoridades afganas los soldados estadounidenses mataron por error a un niño de cinco años. El niño fue herido de gravedad y murió en el hospital. "Las tropas creyeron que era un combatiente talibán", denunció un portavoz del gobierno provincial.
El ejecutivo de Kabul condenó el hecho y la misión internacional ISAF prometió una investigación.
JOV (dpa, Handelsblatt)