Ecuador: no más cooperación ambiental alemana

"Ecuador da por terminada unilateralmente la cooperación alemana en los temas ambientales", dijo el canciller en una rueda de prensa en el sur del país, después de la polémica por la decisión de Quito de prohibir el ingreso de una delegación de diputados alemanes que pretendía visitar los proyectos de explotación petrolera en la zona del Yasuní, en la Amazonía, y reunirse con representantes de organizaciones ambientalistas locales (foto).

Patiño dijo que esa cooperación se ha concretado en unos siete millones de euros (8,54 millones de dólares) para el programa ambiental Socio Bosque, "que serán devueltos a Alemania, con sus respectivos intereses". El funcionario explicó que la resolución se toma porque no se permitirá que Alemania considere "que por haber dado recursos a nuestros bosques" pueden estar autorizados y "tener prerrogativas para hacer supervisiones en este país".

"Como amigos, las puertas abiertas, como supervisores, las puertas cerradas", sentenció Patiño al asegurar que "no tienen que venir ustedes a consultar con ninguna otra persona, entidad, peor con la oposición del gobierno ecuatoriano (...) a confirmar lo que el gobierno de Ecuador dice para hacerse sus propias apreciaciones. Si no respetan y no creen en la palabra del gobierno de Ecuador, entonces no es bienvenida la cooperación de Alemania para nuestro país".

“Curso para parlamentarios alemanes”

Patiño anunció, adicionalmente, que el Gobierno de Ecuador está dispuesto a negociar un convenio de cooperación para entregar al alemán siete millones de euros para que establezca "algún plan, algún curso para sus parlamentarios, para que se actualicen sobre los conceptos de autodeterminación de los pueblos y respeto mutuo": "Como amigos, las puertas están abiertas, como supervisores, las puertas están cerradas", sentenció el diplomático.

El titular de la diplomacia ecuatoriana recordó que en 2012 se firmó un convenio de cooperación con Alemania valorado en 36 millones de euros (43,9 millones de dólares al cambio de hoy) para la protección de la biosfera de Yasuní, monto del que el país andino "no ha recibido un solo centavo", según señaló. Indicó que Ecuador va a valorar detalladamente lo que se ha recibido de Alemania en los últimos años para programas ambientales e inmediatamente se realizará la transferencia anunciada, sin precisar una fecha.

¿Puerta cerrada?

El fin de semana, el presidente de Ecuador, Rafael Correa, censuró los reclamos de Alemania por la prohibición de ingreso al país de los diputados alemanes, que querían supervisar el destino de aportes del país europeo para el Yasuní. Correa pidió entender que Ecuador es un país soberano y que en el mundo "se acabó el colonialismo y el imperialismo".

El 2 de diciembre, y alegando que el programa del viaje era "inaceptable debido a la falta de ecuanimidad", el gobierno ecuatoriano había comunicado a la embajada alemana en Quito que denegaba el permiso de ingreso de un grupo de parlamentarios alemanes, integrado por representantes de la gran coalición de Angela Merkel y de los opositores Verdes, que se proponía entrevistarse con ambientalistas contrarios a la explotación petrolera en Yasuní, de camino a la Cumbre Climática de la ONU que se celebró en Lima del 1 al 14 de diciembre.

El ministro alemán de Cooperación, Gerd Müller, por su parte, criticó la decisión ecuatoriana de vetar la entrada de los diputados alemanes.

En entrevista con Deutsche Welle a inicios de esta semana, el embajador de Ecuador en Alemania, Jorge Jurado, explicó que el gobierno de Ecuador vetó la entrada en el país de la delegación de diputados alemanes porque la visita no había sido "convenientemente coordinada" entre ambas partes. Jurado criticó las declaraciones del ministro alemán de Cooperación y Desarrollo, así como el tratamiento que un diario germano hiciera del tema. El embajador apostó entonces por el diálogo para llegar a acuerdos que pusieran fin al cruce de reproches pero, el nuevo anuncio del Gobierno ecuatoriano parece cerrar esa puerta.

No es la primera vez

En agosto de 2013, el presidente ecuatoriano tuvo otro "impasse" con Alemania, cuando ese país mostró su preocupación por el fin de la iniciativa de dejar bajo tierra reservas petroleras en el parque nacional Yasuní, que ahora están en proceso de explotación. Correa dijo esa vez a Alemania "quédense con su plata" y anunció, igual que ahora lo hizo el canciller Patiño, que había dispuesto que se devuelva "hasta el último centavo" a ese país por sus contribuciones ambientales.

La iniciativa Yasuní fue durante años el proyecto estrella en materia ambientalista de Ecuador, cuyo gobierno estaba dispuesto a preservar íntegramente el parque amazónico a cambio de que la comunidad internacional compensara las pérdidas de tal renuncia con aportes financieros. El Gobierno ha asegurado que en la explotación de una parte del parque donde se encuentran los yacimientos se utilizará la más alta tecnología para evitar al máximo los daños al medio ambiente.

RML (efe, dpa)