Dudan de acto terrorista en Alemania
2 de agosto de 2006La tesis de que las maletas bombas encontradas a principios de esta semana en las ciudades de Dortmund y Coblenza sean el indicio de actividades terroristas en Alemania, no parece plausible. Así lo afirma Rolf Tophoven miembro del Instituto de Investigación del Terrorismo y Política de Seguridad en Essen (IFTUS) y experto en el tema a nivel nacional e internacional, al referirse al caso que desde el lunes ocupa a las autoridades alemanas que investigan quién fabricó los explosivos y cuál es el objetivo que se perseguía con los mismos.
El lunes en la tarde un pasajero encontró una maleta abandonada en un tren regional que viajaba entre Aquisgrán y Hamm. La maleta fue entregada en la estación de Dortmund a la espera de que su posible dueño la reclamara. La maleta inspeccionada al día siguiente arrojó la sorpresa de que en su interior se encontraba una bomba que tuvo que ser desactivada.
Ese mismo martes, en la central de trenes de Coblenza, se encontró una segunda maleta que albergaba una botella de gas propano con otros accesorios para facilitar su explosión. Por fortuna, los dos artefactos no explotaron y no generaron ninguna pérdida humana o material.
Investigaciones marchan
Las primeras investigaciones de la fiscalía alemana han tejido dos tesis que todavía están por definirse y confirmar: o bien se trata de un desconocido grupo terrorista, o bien existe un intento de extorsión contra la empresa de ferrocarriles alemanes.
Para Tophoven la posibilidad de que las bombas hayan sido colocadas por un grupo terrorista no es plausible porque, de haber sido así, dichos artefactos habrían hecho explosión en los sitios donde fueron dejados. "La simplicidad de las bombas deja entrever que en su fabricación no intervinieron expertos que pertenezcan a algún grupo de personas que quiera sembrar terror en Alemania a gran escala", subraya el especialista.
El experto en terrorismo niega también que Alemania esté expuesta a atentados terroristas que provengan del grupo Al Qaeda porque el país se opuso a la guerra que Estados Unidos emprendió contra Irak.
Caso similar
En Alemania se registró un caso similar hace tres años en la estación central de Dresde, en donde un hombre de 64 años, comerciante de bienes inmuebles, dejó una bomba que por defectos en su fabricación no explotó.
El anciano pretendía extorsionar con este acto al banco alemán Deutsche Bank para obtener una millonaria suma. En julio de 2005 fue juzgado y condenado a 12 años de cárcel por intento de homicidio, extorsión y delito con armas.