Duérmete niño...

Después del inglés, la gimnasia y las clases de ballet, llevar a los niños una horita a correr al parque para que caigan puntualmente exhaustos a la hora de dormir. Del chupete a Caperucita Roja, todo truco ha sido puesto en práctica por padres desesperados con tal de que sus hijos caigan en los brazos de Morfeo.

Los participantes en el concurso de canciones de cuna optan un método tan tradicional como, en vistas a los resultados, eficaz: cantar. No todos los padres están dotados del talento musical de los concursantes, pero según los pedagogos, el hábito del canto contiene más que la canción en sí. Se trata de establecer una estrecha relación con los hijos, de acostumbrarlos a una rutina y de transmitirles una sensación de seguridad.

"Cierra tus ojos, granujilla"

"Cierra tus ojos, granujilla" ha sido la canción vencedora. Su autor se llama Carsten van den Berg, y está dedicada a Lilli, su hija de ocho meses. Plácidamente, escuchando cantar y tocar la guitarra a su papá, y las campanillas a su mamá, Lilli se durmió y el jurado decidió que van den Berg merecía el primer premio, consistente en una cartilla de ahorros infantil en valor de 8.000 euros.

El certamen va ya por su cuarta edición y es la primera vez que un hombre resulta vencedor. Van den Berg es pedagogo musical. Él y su mujer tenían muchos problemas para lograr que Lilli conciliara el sueño, hasta que decidieron probar con la guitarra.

La plata fue para Sandra Schuler, que cantó a-cappella para sus hijos de cuatro meses y cuatro años la canción "Un molino de viento gira". El bronce fue para Sabine Merker por "Viaje de ensueño".

Cantar para dormir

"En los dormitorios de Alemania, en comparación con otros países, se canta demasiado poco", dijo Meter Rohrbach, director de una escuela de música de Colonia y miembro del jurado. Aún así, la tradición alemana en canciones de cuna es bastante rica, y muchas de ellas pudieron oírse en la final del concurso.

Requisito indispensable era que los niños se durmieran al son de la música, por lo que muchos padres decidieron entonar canciones populares, como "La, le, lu, sólo el hombre sobre la Luna está mirando", del famoso actor alemán Heinz Rühmann. Bajo un cielo de estrellas artificiales, muchos bebés dormían ya antes de empezar.

Meter a los niños en la cama sin llantos ni peleas es un ideal que no se concede a todos los papás y mamás. Pero demostrado queda tras este concurso, que cantar ayuda.