Dossier: México, una sociedad militarizada
26 de mayo de 2017Publicidad
La presencia de soldados patrullando las calles puede dar cierta garantía de seguridad, pero también puede abrir las puertas a que se cometan abusos que luego no puedan ser resueltos por las autoridades. El afán de control podría generar precisamente el efecto contrario, el descontrol.