Diálogo entre UE y América Latina en vísperas de Cumbre de Lima
13 de marzo de 2008
“La exclusión social y la necesidad de fortalecer la cohesión social dentro de nuestros países son un tema de fundamental importancia tanto para América Latina como para Europa”, dijo a DEUTSCHE WELLE Andrej Bajuk, ministro de Hacienda de Eslovenia, el país que preside la Unión Europea durante este primer semestre de 2008. El “Diálogo entre la Unión Europea y América Latina”, realizado en Berlín, fue un foro auspiciado por la Agencia federal para Cooperación y el Desarrollo y la organización Invent.
Aunque las experiencias son distintas en América Latina, hay ciertas lecciones del continente europeo que podrían ser útiles, agregó Bajuk quien considera que “urge la generación de un consenso político sobre el papel del Estado en la eliminación de la desigualdad social”.
“Mientras la carga impositiva en Europa varía entre un 28% en Rumania y más del 50% en Suecia, en América Latina apenas ronda entre el 15 y 17% en promedio. Yo creo que aquí un ámbito en el que la clase política latinoamericana debería enfrentar los problemas sociales porque la cooperación internacional no puede, de ninguna manera, reemplazar el esfuerzo que cada sociedad debe hacer para lograr la cohesión social y evitar la exclusión”, dice el político esloveno.
América Latina: un idioma, un mundo de diferencias
Justamente en el diálogo se hacen evidentes las diferencias, también sobre el concepto de lo que es América Latina para Europa y de cómo se deben tratar en negociaciones bilaterales: ¿Con toda la región “en bloque” o directamente con cada país, como lo está practicando Estados Unidos en los últimos tiempos?
Andrej Bajuk, por su parte, está convencido de que “la UE continuará el diálogo - como un conjunto, como un mercado único - con América Latina”. Según el ministro de Hacienda de Eslovenia, “es mucho más adecuado tratar con una América Latina - que tiene muchas más cosas en conjunto de lo pudiera parecer”. Para Bajuk, las actitudes de Estados Unidos no deberían ser un ejemplo para nosotros. La Unión Europea debería seguir su curso.
Estado de relaciones entre Nuevo y Viejo Continentes
Para otro participante del foro berlinés, José Arista Aribildo, viceministro de Hacienda del Perú, “las relaciones entre la Unión Europea y América Latina están pasando por un muy buen momento. La Unión Europea ve a América Latina como un conjunto homogéneo de países, que si bien no es negativo, dificulta en cierto grado las cosas, porque la realidad es que somos países con grandes diferencias”.
La cuestión social es el talón de Aquiles
América Latina sigue siendo una región con grandes desigualdades sociales. Y justamente aprender de la experiencia europea para establecer el equilibrio social es un empeño de los latinoamericanos.
“Cierto es que la Unión Europea ha logrado éxitos sociales gracias a la política unitaria, pero nosotros miramos hacia delante y cada país en América Latina tiene sus propias, aunque diferentes políticas y estrategias para superar la pobreza. Perú mismo tiene políticas que difieren a las de Bolivia, Ecuador y Venezuela, por ejemplo. Nosotros no compartimos esos lineamientos políticos o económicos, pero de todas maneras, somos muy respetuosos de los caminos que los citados países están siguiendo”, indica José Arista Aribildo.
Pero la lucha contra la pobreza pasa por el crecimiento económico y la inversión extranjera es una de sus fuentes. Por otro lado, sólo puede haber inversión externa en países que garanticen seguridad.
“No es correcto que la inversión vaya a donde los impuestos sean más bajos. La inversión va a donde existe estabilidad tributaria. Nadie va a invertir su plata en un país en donde no existen derechos de propiedad asegurados. Ni a donde, por más que se ofrezcan bajas tasas de interés, nadie asegure que las leyes tributarias sean vigentes el día de mañana”, advierte el político peruano.
Corrupción, narcotráfico e inestabilidad tributaria
La evasión tributaria también fue uno de los temas tratados en este encuentro biregional. En América Latina hay tres problemas en este sector, sostiene Arista Aribildo. “El primero es el alto grado de informalidad de la economía que rodea el 40%; el segundo es la evasión y el tercer problema lo crean las personas comunes y corrientes que eluden pagar impuestos aprovechando las debilidades de los sistemas de recaudo”.
La corrupción, el narcotráfico y la inestabilidad tributaria son, según el representante peruano, los grandes problemas que enfrenta América Latina, sobre todo en los países de la región andina. “Estos son problemas que tienen que ser tratados de raíz. Sobre todo, estimulando la inversión extranjera como una fuente para el crecimiento y el desarrollo”.
Justamente la estabilidad tributaria y el equilibrio financiero fueron temas tratados en el diálogo entre la UE y América Latina. “El desequilibrio financiero obliga a los países a endeudarse y un endeudamiento recurrente genera cada vez más pobreza”, concluye José Arista Aribildo quien recuerda que en la lucha contra el narcotráfico América Latina recibe de la Unión Europea apoyo técnico y financiero. Al fin y al cabo, “el narcotráfico no sólo afecta a los países productores, como los países andinos, sino también a los consumidores”.