¿Dejará de reducirse la población de Alemania?
4 de febrero de 2017Los pronósticos demográficos de Alemania aseguraron por muchos años que la población disminuiría a largo plazo. Según los datos de la Oficina de Estadística Federal y el Instituto de Investigación de Población, la razón se hallaba en la reducción permanente del índice de natalidad de 1,4 hijos por mujer, así como en una baja taza de inmigración de 100 mil personas por año.
Se concluyó entonces que, para el 2060, la población de Alemania se reduciría de 80 a solo 68 millones de habitantes.
Sin embargo, de acuerdo con nuevos pronósticos presentados al gabinete del gobierno federal alemán, este pronóstico se debe actualizar, ya que un incremento en el índice de natalidad y la tasa de inmigración podrían dar a Alemania una estabilización de la población, en vez de un descenso.
¿Estabilización demográfica hasta el 2060?
Hasta ahora, se asumía que el número de inmigrantes a Alemania por año oscilaba entre los 100 mil a 200 mil, pero el gobierno ha incrementado esta cifra a 300 mil. Asimismo, el índice de natalidad vio un crecimiento de 1,4 al 1,6 niños por mujer.
El reporte de la Oficina Federal de Estadística indica que "un balance de inmigración de 300 mil con un índice de natalidad de 1,6, más un incremento en la esperanza de vida, resultaría en que la población de Alemania permanezca estable, a su nivel actual, hasta el 2060”.
En 2015, Alemania recibió un incremento de un millón de inmigrantes, impulsado por la llegada de refugiados de Siria, Irak y Afganistán, mientras que en 2016 acogió a 750 mil.
El Ministerio del Interior niega que la crisis demográfica se pueda evitar. A pesar del incremento en la inmigración y los partos, el gobierno asegura que el envejecimiento significativo de la población continuará, aun con el agregado de 300 mil inmigrantes por año.
Al mismo tiempo, con la creciente esperanza de vida, crecen los problemas de financiamiento de pensiones y servicios de salud para los ancianos.
El envejecimiento sacude al mercado de trabajo
El profesor Enzo Weber del Instituto de Investigación Laboral y Ocupacional indicó, en entrevista con DW, que "aun si se incrementara el índice de natalidad a 2,5 niños por mujer, esto no detendría el cambio demográfico en el mercado de trabajo”, siendo 65 años la edad de jubilación.
Según el experto, solo se puede mitigar este problema con más incremento en la inmigración. Pues, para mantener niveles más o menos estables de gente empleada en Alemania (actualmente 43,8 millones), se necesitarían 400 mil inmigrantes por año.
Pero como la integración de tantos inmigrantes al mercado de trabajo y a la sociedad tiene sus dificultades, Weber asume que el descenso en el número de empleados seguirá su curso.
A raíz del cambio demográfico en el sector laboral, Weber pronostica consecuencias fatales para las comunidades rurales y ciertas industrias: "Se secará el mercado laboral en muchas partes, y sectores que dependen de un cierto número mínimo de empleados podrían colapsar rápidamente”, en la medida en que los empleados capacitados se jubilan.
En los últimos años se había retrasado este fenómeno con el flujo de trabajadores de Rusia y Europa Oriental, más la llegada de refugiados, pero −advierte Weber− "esto no durará por siempre”, .