Deforestación cero: la promesa de Lula para salvar el clima
16 de noviembre de 2022La Amazonia es el mayor bosque tropical del mundo. Ayuda a regular el clima y, sobre todo, las precipitaciones en todo el continente americano, lo que la convierte en una fuente vital de agua para los habitantes de la región. Pero casi el 20 por ciento ha desaparecido desde 1970 debido a la tala y la quema. El enorme depósito de carbono ha empezado incluso a emitir más carbono del que almacena
Durante la última etapa de Lula en el poder, de 2003 a 2010, su Gobierno redujo la deforestación de la Amazonia en un 67 por ciento. Gran parte de ese trabajo se ha arruinado bajo la presidencia de Jair Bolsonaro, cuando la deforestación de la Amazonia se disparó a tasas alarmantes. La deforestación alcanzó nuevos récords en septiembre y octubre de 2022. La tala y la quema de la selva se dispararon bajo Bolsonaro, incrementando en casi el 10 por ciento de las emisiones anuales de CO2 de Brasil en 2020.
Lula ha prometido poner fin a la deforestación y proteger los derechos territoriales de los pueblos indígenas, cuyas tierras fueron explotadas por madereros, mineros y ocupantes ilegales bajo el Gobierno de Bolsonaro.
Amazonia, tala a ritmo récord
"Tan pronto como reasuma la presidencia, Lula debe especificar cómo planea mantener el estado de derecho en la Amazonia y proteger tanto la selva como a sus defensores", dice María Laura Canineu, directora de Brasil en Human Rights Watch. Puyr Tembe, que asiste a la COP27 en representación del pueblo teneteara de Brasil, pide a Lula que "cumpla sus promesas”, y agrega que "Brasil puede ser un modelo para otros países en cuanto a la lucha contra la deforestación y el robo de tierras".
Esta semana, Brasil se comprometió a preservar los bosques al firmar una alianza trilateral con la República Democrática del Congo e Indonesia con el objetivo de proteger más de la mitad de la selva tropical del mundo. Lula tiene previsto reunirse con el enviado de EE. UU. para el clima, John Kerry, y anunciar la disposición de Brasil a acoger la cumbre COP30 en 2025, según el periódico brasileño O Globo.
La antigua y probable futura ministra de Medio Ambiente de Lula, Marina Silva, ya ha mantenido reuniones en la cumbre de la ONU. En declaraciones a los medios de comunicación brasileños en la COP27, Silva dijo que el Partido de los Trabajadores de Lula había sido responsable en su día del 80 por ciento de las áreas forestales protegidas creadas en el mundo.
Marina Silva: "Hay voluntad de volver a invertir en Brasil"
El mundo quiere que Brasil vuelva a ejercer un papel de liderazgo, añadió Silva. Tras las reuniones mantenidas la semana pasada con John Kerry y los directores del Banco Mundial, "hay voluntad de volver a invertir en Brasil", dijo la exministra.
Esto incluye retomar las negociaciones del acuerdo del Mercosur con la Unión Europea. El acuerdo es un pacto comercial con los Estados latinoamericanos, que incluye sólidos compromisos climáticos. Marina Silva ha pedido a EE.UU. que se una también al Fondo Amazónico, creado en asociación con Alemania y Noruega en 2008 para ayudar a financiar la protección de la región y la biodiversidad.
A principios de noviembre, un portavoz del Ministerio de Desarrollo alemán dijo que el país quiere liberar fondos para la protección de la selva amazónica en el marco del acuerdo. Noruega también dijo que reanudaría la ayuda financiera a Brasil en el marco del fondo. Los dos países dejaron de hacer pagos en 2019, después de que Bolsonaro asumiera la presidencia y debilitara las medidas de protección ambiental en la Amazonia.
(jov/ms)