Crisis fronteriza: Polonia y otros culpan a Bielorrusia
15 de noviembre de 2021Los reportes provenientes de la frontera entre Polonia y Bielorrusia son cada vez más trágicos. El sábado, la televisora polaca TVN indicó que el cuerpo de un joven sirio de unos 20 años había sido encontrado en el bosque cerca de Wolka Terechowska. "La causa de la muerte aún no se ha determinado", dijo el medio al citar a los guardias fronterizos polacos.
Asimismo, precisó que alrededor de 100 personas habían intentado cruzar la frontera por el mismo lugar a la misma hora, pero que sus intentos habían sido frustrados. También que habían sido arrestados unos traficantes ucranianos y polacos de personas que planeaban llevar migrantes a Alemania.
Los informes diarios de la policía fronteriza polaca han sonado muy similares por meses. El gobierno desplegó unidades adicionales de la policía y el ejército y erigió una cerca temporal de alambre de púas.
Según fuentes polacas, hay unas 4.000 personas varadas en la zona. Son principalmente de Irak, Siria y Afganistán, y con frecuencia intentan cruzar la frontera. El sábado, el presidente polaco Andrzej Duda visitó las tropas estacionadas en la frontera y les agradeció su defensa de Polonia y la Unión Europea (UE).
La culpa recae sobre Lukashenko
La situación no es diferente en la frontera entre Lituania y Bielorrusia, donde la policía fronteriza lituana ha registrado cientos de intentos ilegales de ingresar al país en las últimas semanas. Desde principios de año, más de 4.000 personas han cruzado ilegalmente a Lituania desde Bielorrusia. Los funcionarios fronterizos han devuelto a más de 6.000.
Según Andrzej Pukszto, politólogo de la Universidad de Kaunas, en Lituania, existe un amplio consenso político entre el gobierno y la oposición con respecto a la situación y todos los políticos responsabilizan de la crisis al presidente bielorruso Alexander Lukashenko.
Sin embargo, no están de acuerdo en cuanto a la cantidad de ayuda que Lituania debería ofrecer a los que intentan cruzar la frontera. "Hay mucha gente necesitada en Lituania, gente que subsiste en la línea de pobreza o incluso por debajo de ella", lamentó Pukszto. De acuerdo a estadísticas oficiales, 20% de la población se encontraba en esta situación en 2020.
"Por eso hay un acalorado debate sobre cuántos migrantes y refugiados puede acoger el país", explicó el catedrático, a la vez que insistió en que no ha habido grandes protestas contra los refugiados en Lituania.
Un duro acto de equilibrio
Juris Rozenvalds, sociólogo de la Universidad de Letonia, en Riga, sostiene que hay un consenso similar con respecto a la migración en Letonia y señala el apoyo unánime en el Parlamento a la decisión de imponer un estado de emergencia en la frontera con Bielorrusia en agosto.
Además detalló que hasta mediados de este verano, al menos 400 refugiados que habían cruzado la frontera habían sido aceptados. "En los últimos meses, 60 personas, principalmente mujeres y niños, han sido aceptadas por motivos humanitarios", dijo.
El político letón Boris Tsilevich, que preside el comité de elección de jueces al Tribunal Europeo de Derechos Humanos, explicó que el gobierno tenía que llevar a cabo un duro acto de equilibrio: evitar los intentos ilegales de ingresar al país y al mismo tiempo cumplir con sus obligaciones internacionales de defender los derechos humanos. Esto fue "extremadamente difícil", apuntó.
Acalorado debate en Polonia
En Polonia, el debate político es considerablemente más acalorado que en Lituania y Letonia. Todos los partidos coinciden en que Lukashenko tiene la culpa, pero no se ponen de acuerdo sobre el enfoque a seguir. Muchos políticos de la oposición no comprenden la negativa del gobierno a aceptar la ayuda de la UE para asegurar las fronteras.
El jefe del partido gobernante Ley y Justicia (PiS), Jaroslaw Kaczynski, está buscando apoyo en otros lugares. Invitó al exministro italiano del Interior y líder de la populista Lega Nord, Matteo Salvini, y a otros políticos de extrema derecha a conversaciones en Varsovia en diciembre sobre "defender Las fronteras de Europa".
Aunque es difícil saber qué sucederá, lo cierto es que el estado de emergencia en Polonia finalizará el 2 de diciembre y no puede extenderse por razones constitucionales. ¿Se impondrá la ley marcial en su lugar? El primer ministro polaco Mateusz Morawiecki ha dicho que no.
El Parlamento aprobó la construcción de un muro de cinco metros de altura en la frontera con Bielorrusia, pero no está previsto que se construya antes de la primavera.
(rr/jov)