Costa Rica inauguró recientemente la primera planta de reciclaje de baterías de litio de la región. Lo interesante es que durante el proceso se obtiene el “Black Mass”, conocido como el nuevo oro negro: un polvo oscuro que se puede reutilizar para fabricar nuevos productos electrónicos y baterías. Un ambicioso proyecto que cuenta con el apoyo de la GIZ, la Cooperación Alemana para el Desarrollo.