Coronavirus, protección civil y las trabas del federalismo
29 de marzo de 2021En 2012, los expertos de la Oficina Alemana de Protección Civil (BKK), en colaboración con el Instituto Robert Koch (RKI), hicieron un amplio análisis de riesgo, tomando como ejemplo un escenario parecido al que se vive ahora con la pandemia. El escenario imaginado describe la propagación de un nuevo virus por todo el mundo desde Asia. Alemania sufre tres oleadas de contagios con el ficticio "virus Modi SARS". Entre otras cosas, se previeron cuellos de botella en el suministro de productos farmacéuticos, equipos de protección y desinfectantes. Los resultados de dicho estudio quedaron en el olvido.
¿Quién es el responsable?
Parlamentarios de La Izquierda preguntaron al Gobierno, el pasado julio, qué medidas había tomado después de los resutados del análisis de riesgo de 2012. Este respondió que no tenía "conocimiento de ninguna medida adoptada por los estados federados (...) en el marco de su responsabilidad de salud y control de desastres".
Cuando se hizo referencia a las distintas competencias de los gobiernos regionales y el central, se puso de manifiesto dónde radica el problema: según la Constitución, el control de desastres y las medidas de precaución correspondientes son responsabilidad de los estados federados.
El resultado es paradójico. La BBK es, en realidad, la autoridad ideal para enfrentarse al mayor desafío, después de la Segunda Guerra Mundial, como la canciller llamó a la crisis del coronavirus. Pero esta oficina tiene apenas competencias. Por eso, surgió la pregunta: ¿Qué hacen entonces los aproximadamente 400 empleados de la BBK? ¿Para qué se utilizan exactamente sus 18 helicópteros?
Planes de reestructuración
Armin Schuster, político de la CDU, es el jefe de la BBK desde el pasado otoño. A mediados de marzo, el expolicía y el ministro del Interior, Horst Seehofer, presentaron sus planes para la reestructuración de esta oficina.
Nueve millones de alemanes ya tienen a la BBK en su celular: descargaron su aplicación de advertencia "NINA" para casos de inundaciones, tormentas e información sobre el coronavirus.
La diputada de Los Verdes Irene Mihalic cree que la mayor contribución de la BBK está en la lucha contra pandemias y en la expansión de la aplicación de advertencia. En una declaración escrita a DW, la política también lamentó que las capacidades de la BBK "apenas se utilizaron" durante la pandemia. "Me hubiera gustado que la BBK hubiera podido asumir más responsabilidades", escribió la política.
Armin Schuster tiene grandes expectativas: "Esperamos y estamos trabajando hacia el objetivo de poder establecer una imagen mucho más completa de la situación, es decir, una imagen integradora de todas las habilidades, reservas y situaciones operativas de todos los involucrados, ya sea en el el Gobierno federal, los estados y municipios o las organizaciones de ayuda".
En Bonn, la BKK de hecho ya tiene una central bien equipada.
"Ha llegado el momento de la relevancia"
La política Sandra Bubendorfer-Licht, del grupo parlamentario de oposición liberal, también afirmó que "la BBK debe finalmente encontrar su papel como entidad central". El sistema federal alemán tiene sus fortalezas, "pero cuando se trata de velocidad, efectividad y contundencia, necesitamos coordinación y alguien que lleve la batuta", lamentó.
El jefe de la BBK no puede ir tan lejos, al menos no sin una enmienda constitucional que aporte más poderes al Gobierno central a la hora de ofrecer ayuda en situaciones catastróficas. El Ministerio de Salud y la BBK trabajan ahora juntos para establecer una reserva nacional de protección de la salud. Más vale tarde que nunca.
(rmr/ers)