Consejo de Europa debate sobre actividades ilegales de la CIA
27 de junio de 2007
El punto central del informe de Marty consiste en su denuncia de que la CIA estableció cárceles secretas en Polonia y Rumania para interrogar a sospechosos de terrorismo. Aunque los gobiernos de ambos países no han admitido hasta la fecha haber permitido a la CIA utilizar su territorio para la gestión de cárceles secretas, Marty recordó durante la apertura del debate en Estrasburgo que la existencia de dichas prisiones fueron denunciadas por el diario estadounidense Washington Post en un artículo publicado en noviembre de 2005. Aunque a petición de la Casa Blanca, en dicho reporte no se mencionaba por su nombre a 'varias democracias de Europa Oriental'.
El legislador suizo se encuentra en el ojo del huracán desde que el pasado diciembre asumiera la responsabilidad de dirigir las investigaciones del Consejo de Europa sobre las actividades ilegales de la CIA en el Viejo Continente. Una misión que comparan observadores como una lucha de David contra Goliat.
Pruebas respaldan las acusaciones
Durante su intervención Marty defendió su segundo informe sobre detenciones secretas y transporte ilegal de detenidos por parte de la CIA, en el que asegura que existen pruebas para respaldar sus acusaciones. Marty señaló que cientos de personas fueron secuestradas sin control judicial y algunas de ellas siguen detenidas en Irak, Afganistán, Guantánamo e incluso Europa.
Tras la presentación del informe de Marty, el 8 de junio pasado en París, las autoridades polacas y rumanas negaron la tesis del eurodiputado de que entre el 2003 y 2005 la CIA operó centros secretos de detención en dichos países. El primer informe de Marty fue publicado el año pasado, en el que denunció la existencia de una compleja red de vuelos secretos de la CIA para trasladar a supuestos terroristas a los centros de detención.
Silencio de gobiernos europeos
"Después de que el mismo presidente George W. Bush admitiera la existencia de estos centros de detención, las tesis de Marty ya no pueden ser puestas en tela de juicio", dijo el presidente de la Asamblea Parlamentaria, René van der Linden.
Marty reconoció la coherencia de la administración Bush, que admitió la existencia de esos centros, frente al silencio que ha obtenido como respuesta de algunos gobiernos europeos. El legislador suizo condenó que países como Italia, Alemania, Macedonia y Rusia hayan argumentado el secreto de Estado o la seguridad nacional para obstaculizar las investigaciones judiciales. La Asamblea concluirá el debate con una resolución que prevé una demanda de indemnización para las victimas de dichos operativos al margen de la ley.