CSM 2024 finaliza con indecisión sobre Ucrania
19 de febrero de 2024Era alrededor del mediodía del primer día de la Conferencia de Seguridad de Munich (CSM) cuando la noticia de la muerte del opositor ruso Alexei Navalny apareció en las notificaciones de los teléfonos inteligentes de los participantes de todo el mundo.
El rival más conocido del presidente ruso Vladimir Putin y un destacado detractor de la invasión rusa a Ucrania había muerto en un campo de prisioneros en Siberia.
La noticia marcó el tono de los tres días de la edición 60 de la conferencia, aunque los organizadores intentaron mantener un enfoque más diverso, sin olvidar otras crisis en el planeta.
Putin y Trump
En los pasillos y cafeterías del laberíntico recinto de la CSM, el Hotel Bayerischer Hof, las conversaciones giraron en torno a dos personas que ni siquiera estaban allí: Putin y el expresidente estadounidense Donald Trump.
Uno de ellos, Putin, incluso pudo cantar una victoria el fin de semana, la captura de la ciudad de Avdivka, en el este de Ucrania.
El otro, Trump, está bloqueando -a través de sus partidarios en el Partido Republicano- un paquete de ayuda para Ucrania de 60.000 millones de dólares, presentado por el presidente estadounidense Joe Biden.
En Múnich, la vicepresidenta estadounidense Kamala Harris dejó claro que ella y Biden todavía están intentando conseguir una mayoría en la Cámara de Representantes de Estados Unidos, donde los republicanos tienen mayoría. Hasta ahora, el paquete de ayuda sólo ha sido aprobado en el Senado.
"Hay mucho en juego en su lucha para su país y el mundo entero", dijo Harris a Zelenski al margen de la conferencia. Sus palabras probablemente estaban dirigidas principalmente a una audiencia nacional en Estados Unidos. "Es de interés estratégico para Estados Unidos continuar nuestro apoyo", expresó en una rueda de prensa conjunta con Zelenski.
Zelenski pide armas a Estados Unidos
Durante las conversaciones con los senadores estadounidenses, el presidente ucraniano destacó que Ucrania depende de nuevas armas y municiones de Estados Unidos.
Su Ejército necesita "sistemas de artillería y municiones adicionales, armas de largo alcance, equipos de guerra electrónica y defensa aérea", dijo Zelenski posteriormente en la red social X.
Pero aún después de esta conferencia no está claro si Biden puede realmente organizar una mayoría en la Cámara de Representantes, para apoyar la ayuda a Ucrania. En el tercer día de la CSM, cuando la mayoría de los jefes de Estado y de Gobierno ya se habían marchado, J.D. Vance, senador republicano estadounidense y partidario de Trump, afirmó que el problema en Ucrania es que "no hay un punto final claro".
Europa debe reforzar la defensa
Vance argumentó que Estados Unidos no podría producir tantas armas como serían necesarias ni en la guerra ni como elemento disuasorio, dados los numerosos conflictos en el mundo, incluyendo en Europa del Este, Medio Oriente y, "potencialmente, una contingencia en el este de Asia".
Sin embargo, el fin de semana en Múnich, el primer ministro neerlandés saliente Mark Rutte también dejó claro que no tenía sentido centrarse únicamente en los problemas de la ayuda estadounidense a Ucrania. En vista de la amenaza de la Rusia de Putin, la industria de defensa europea debe aumentar la producción, para Ucrania pero también para sus propios ejércitos europeos.
Poco después de conocerse la noticia de la muerte de su esposo, Yulia Navalny también tuvo unas breves palabras para Putin, a quien culpó del fallecimiento. "Serás castigado por lo que le hiciste a nuestro país y a mi familia", dijo en ruso en la CSM. "Ese día llegará pronto", advirtió.
Entre todos los participantes en los debates y conversaciones de este fin de semana en la CSM, fue Yulia Navalny quien se mostró más decidida sobre la necesidad de ayudar a Ucrania y rearmar a Europa para disuadir a Rusia.
(rr/rml)