Con inusitado consenso finalizó la Cumbre del Clima en Cancún
11 de diciembre de 2010La conferencia sobre cambio climático de Cancún consiguió hoy (11.12.2010) salvar el proceso de negociaciones climáticas de la ONU al aprobar dos acuerdos finales, pese a la oposición de Bolivia, en una sesión que duró diez horas más que lo previsto.
"Se ha dado un paso muy grande al restablecer la confianza de la comunidad internacional en el multilateralismo", dijo el presidente de México, Felipe Calderón, que apareció en el salón de sesiones después de la aprobación de los documentos para la ceremonia de cierre.
Calderón dijo que con los desacuerdos de la cumbre del año pasado en Copenhague "se había dañado notablemente la confianza de todos". "La esperanza ha vuelto", aseveró.
Los acuerdos
Los documentos recogen compromisos en temas como financiamiento, reducción de emisiones, adaptación al cambio climático o deforestación. Entre los aspectos centrales están la creación de un Fondo Verde y la afirmación de que se buscará darle continuidad al Protocolo de Kioto de reducción de emisiones después de 2012.
En algunos puntos se encontraron soluciones vagas o sólo se estableció el compromiso de seguir discutiendo, en un "delicado balance", como expresaron varias delegaciones, que permitiera destrabar el estancamiento.
La aprobación de los textos llegó pasadas las tres de la madrugada del sábado, cuando se tenía previsto concluir el viernes a las seis de la tarde.
Bolivia quedó como el único país que se opuso de manera rotunda a aceptar los documentos y amenazó con recurrir a las instancias necesarias para hacer cumplir la regla de que los documentos se aprueban por consenso.
Oposición boliviana
"El precedente es funesto. Hoy será Bolivia y mañana será cualquier país", reclamó el embajador de Bolivia ante Naciones Unidas, Pablo Solón. "Ni siquiera en Copenhague se hizo esto".
La presidenta de la conferencia, Patricia Espinosa, señaló que el consenso no implica que un país pueda vetar las decisiones de los otros 193. "La decisión de la conferencia ha sido tomada", sentenció.
La controversia opacó lo que hubiera sido un éxito sin matices de la conferencia de Cancún. La cita logró sacar adelante un difícil acuerdo luego de dos semanas de debate entre más de 190 países.
Bolivia, que el año pasado no apoyó tampoco el Acuerdo de Copenhague, afirma que se le negó la oportunidad de revisar punto por punto los documentos para plantear sus argumentos.
Triunfo de la diplomacia
Las expectativas para la conferencia eran muy bajas, por lo que el resultado se considera un gran éxito, conseguido con las artes diplomáticas de Espinosa, ministra de Relaciones Exteriores de México.
La funcionaria recibió efusivas muestras de reconocimiento de sus colegas, que la ovacionaron varias veces en un hecho inédito para las cumbres climáticas, por su liderazgo para sacar adelante los acuerdos y revivir un proceso que había quedado herido en Copenhague.
"No podemos ver estas conferencias de Cancún como un final. En todo caso debemos verlas como el principio de una nueva fase de cooperación", dijo Espinosa. "El texto que tenemos frente a nosotros parece ser lo mejor que hemos podido alcanzar en esta etapa".
Agregó que en el futuro habrá muchas otras posibilidades de diálogo para dar seguimiento a temas "que requieren un enorme trabajo" para asegurar el éxito de la próxima conferencia de 2011 en Sudáfrica y las que vengan después.
Satisfacción de China y la India
El ministro de Medio Ambiente de la India, Jairam Ramesh, dijo que el proceso de negociaciones no sólo logró un "paquete equilibrado", sino que "ha restaurado la confianza de la comunidad mundial en el multilateralismo". "Todos hemos ganado y todos hemos cedido", expresó.
También China, el mayor emisor de gases de efecto invernadero, elogió el desenlace. "Las partes han hecho grandes esfuerzos en las negociaciones", dijo el jefe de la delegación china, Xie Zhenhua.
El texto "no es perfecto pero es una buena base para avanzar", expresó el enviado especial de Estados Unidos para cambio climático, Todd Stern.
Un punto importante es que se asentó que se evitará "un vacío" una vez que concluya en 2012 la primera fase del Protocolo de Kioto, único acuerdo vinculante para reducción de emisiones, que fue firmado por 37 países desarrollados pero nunca ratificado por Estados Unidos.
También se decidió crear un fondo de financiamiento que canalice "una parte sustancial" de los 100.000 millones de dólares anuales prometidos por países desarrollados a partir de 2020 para apoyar a países pobres en los desafíos del cambio climático.
El fondo tendría una junta de 24 miembros, repartidos en partes iguales entre países desarrollados y en vías de desarrollo, y sería administrado de manera provisional en los primeros tres años por el Banco Mundial (BM), uno de los puntos objetados por Bolivia.
En el texto se llama también a las naciones desarrolladas a "elevar el nivel de ambición en la reducción de emisiones" y asienta la necesidad de que los países industrializados recorten hasta 2020 sus emisiones de gases de efecto invernadero entre el 25 y el 40 por ciento para estabilizar la temperatura del planeta.
Autora: Andrea Sosa Cabrios (dpa)
Editor: Enrique López