Colombia: carnaval de la diversidad
El tradicional Carnaval de Negros y Blancos, en el sur de Colombia, reúne a personas de diferentes culturas, para celebrar durante varios días una fiesta de la diversidad.
Colorida fiesta
Cada año, la ciudad de Pasto, ubicada a 2.500 metros de altura en los Andes colombianos, se transforma por unos días en un colorido escenario. A comienzos de enero se celebra allí el Carnaval de Negros y Blancos, al que acuden personas de diversas culturas de toda la zona.
Patrimonio de la humanidad
Este carnaval es considerado uno de los más antiguos del continente y el segundo más grande de Colombia. En 2009, la UNESCO lo incorporó a la lista del Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, honrando su valor como expresión de la cultura de los pueblos americanos.
El "Día de negros"
Disfrazarse pintándose la cara de negro tiene entretanto una connotación racista en muchas partes del mundo. Pero en el Carnaval de Blancos y Negros, esta costumbre se inscribe en un contexto diferente: tras un levantamiento de esclavos negros en 1607, el gobierno colonial cedió a sus demandas, por temor a una revuelta mayor. Así, los esclavos recibieron un día libre: el 5 de enero.
El "Día de blancos"
El "Día de los Negros" recuerda la historia de la esclavitud en la región. En la jornada siguiente, el "Día de Blancos", la gente se pinta el rostro de blanco y los participantes en el carnaval se lanzan harina y talco, y se rocían mutuamente con espuma.
La sierra, la costa y la selva
Una integrante del colectivo Indoamericanto maquilla a una mujer para participar en el desfile del "Canto a la Tierra", que tiene lugar el segundo día del carnaval. En esta fiesta se mezclan expresiones culturales de las comunidades de la región andina, la amazónica y la del Pacífico. El departamento de Nariño, en el que se encuentra Pasto, abarca las tres zonas.
Tradición precolombina
Como otras muchas costumbres y tradiciones latinoamericanas, también los orígenes de este carnaval se remontan a la era precolombina. Los pueblos que vivían en la región de Pasto ya honraban entonces por estas fechas al sol y a la luna, y, con sus danzas, rogaban por una cosecha abundante. El carnaval logró adaptar costumbres antiquísimas y mantenerlas con vida hasta hoy.
La Virgen de las Mercedes y la Pacha Mama
En el Carnaval de Negros y Blancos actual se conjugan costumbres y usos religiosos indígenas y coloniales. La Virgen de las Mercedes, la patrona católica de Pasto, es venerada al igual que las divinidades indígenas. En el "Canto a la Tierra" se rinde homenaje a la Pacha Mama, la "Madre Tierra" de los pueblos andinos.
Arte de carnaval
El artista Holman Cabrera da las últimas pinceladas a esta cabeza de dragón. Las coloridas figuras y las celebraciones no solo atraen a los habitantes de la región, sino también a numerosos turistas extranjeros.
Deslife de carnaval
A semejanza de otros carnavales del mundo, también el "Carnaval de Negros y Blancos" cuenta con un desfile de figuras de cartón piedra, de grandes dimensiones, hechas por artistas locales.
Carnaval en tiempos de pandemia
Debido a la pandemia del coronavirus, el desfile tuvo que ser cancelado en esta ocasión. En lugar de recorrer las calles de Pasto, estos artistas, que andan en zancos, se presentan en el estadio Libertad.