Científicos avanzan en el reemplazo celular contra diabetes
9 de junio de 2021Las células beta pancreáticas son las que secretan la hormona de la insulina y un mal funcionamiento de estas es lo que define a la diabetes. Ahora, investigadores han logrado crear un novedoso protocolo para generar este tipo de células con una "alta eficacia" a partir de células pluripotentes humanas.
En concreto, este método, probado "in vitro" y en ratones, permite obtener células beta pancreáticas aptas para autotransplante a partir de células humanas pluripotentes inducidas (iPS), capaces de dividirse de forma indefinida y convertirse luego en cualquier tipo de célula; estas derivan artificialmente de células adultas.
Las células beta son fuente de la insulina, una hormona necesaria para la regulación de los niveles de glucosa en sangre y poder generarlas a partir de células pluripotentes con el objetivo de ser trasplantadas es un objetivo para tratar la diabetes de tipo 1 y 2.
Terapia con reemplazo celular
Este nuevo trabajo, liderado por el investigador español Juan Carlos Izpisúa, del Instituto Salk en La Jolla (California), mejora los protocolos existentes para ello y consigue crear células beta funcionales capaces de revertir la hiperglucemia en ratones en dos semanas.
"Nuestro protocolo proporciona una plataforma robusta para estudiar las células beta humanas y desarrollarlas a partir de células pluripotentes para la terapia de reemplazo celular", según los autores, entre ellos también científicos de la Universidad Católica San Antonio de Murcia (UCAM). Los resultados se publican en Nature Communications.
Avances y obstáculos contra la diabetes
Aunque en la última década se han realizado importantes esfuerzos para conseguir la diferenciación de células iPS humanas en células beta pancreáticas, la aplicación en clínica ha estado obstaculizada por diferentes motivos.
Los protocolos diseñados tienen una eficiencia baja (entre un 10 y un 40 por ciento); las células beta obtenidas son muy heterogéneos y contienen un alto porcentaje de células secundarias no deseadas que no sólo afectan a la maduración y funcionalidad de los cultivos resultantes, sino que suponen un riesgo de formación de teratomas.
Además, la reproducibilidad y la eficiencia requiere optimizaciones intensivas para cada línea celular, según los autores.
EL(efe)