Cien personalidades piden liberación de periodistas alemanes en Irán
2 de enero de 2011La iniciativa en solidaridad con los periodistas encarcelados en la ciudad iraní de Täbris fue publicada este dos de enero de 2011 en el diario Bild am Sonntag, a cuya redacción pertenecen ambos sindicados. La solicitud aparece firmada por varios ministros del gabinete de Angela Merkel, representantes de todos los partidos políticos presentes en el Bundestag y sindicatos laborales, así como de varios premios Nobel y Oscar.
Los dos reportes alemanes, cuyos nombres la prensa alemana evita publicar, habrían ingresado a Irán sin acreditación como periodistas para realizar una entrevista con un hijo de Sakineh Mohammadi Aschtiani, condenada por una corte iraní por presunta infidelidad marital.
Antes lapidación, ¿ahora la horca?
El caso Aschtiani le hado la vuelta al mundo e incluso el ex presidente brasileño Lula le ofreció asilo. Aschtiani, de unos 55 años de edad, habría mantenido una relación extramatrimonial con su primo quien es hoy acusado de asesinato del marido de la señora Aschtiani.
Gracias a la presión internacional, las autoridades iraníes retiraron la condena a lapidación, pero acusaron a Aschtiani de haber sido copartícipe en la muerte de su esposo y ahora está condenada a morir en la horca.
En Irán se aplica desde 1979 la ley islámica de la sharia que prevé la pena capital en casos de infidelidad, asesinato y atraco.
“No podemos callar”
“Ambos (reporteros alemanes) deben regresar lo más pronto posible a Alemania”. Y yo haré todos los esfuerzos posibles para lograrlo”, dijo el ministro germano de Relaciones Exteriores, Guido Westerwelle (FDP).
Por su parte, el ministro de Defensa, Karl-Theodor zu Guttenberg (CSU), advirtió a Teherán de consecuencias en caso de que los dos periodistas sigan siendo retenidos en una cárcel iraní. “Un Estado que está continuamente buscando comprensión, no debería actuar de tal manera que pierda la confianza en otros campos”, expresó en ministro alemán zu Guttenberg.
También el ministro de Finanzas, Wolfgang Schäuble y la ministra del Trabajo, Ursula von der Leyen, ambos del partido cristianodemócrata apelaron a Teherán en el mismo sentido. “Este no es sólo un asunto de libertad de prensa y respeto de los derechos humanos, sino una cuestión de humanidad”, agregó, por lado, el jefe del partido socialdemócrata alemán (SPD) Sigmar Gabriel.
Los Verdes, en su turno, recordaron en cabeza del líder político, Jürgen Trittin, que “la tortura, las lapidaciones y la represión pertenecen a la triste vida diaria en Irán”.
País que quiera respeto, debe respetar
Inédito en Alemania es que también los sectores bancario, industrial y empresarial se unan a una petición de libertad de dos periodistas presos por un régimen dictatorial como Irán.
En esa lista se encuentran el presidente del Bundesbank, Josef Ackermann, el de Telekom, Rene Obermann, el de BMW, Norbert Reithofer, el de Deutsche Bahn, Rüdiger Grube y el de Daimler, Dieter Zetsche quien declaró que “un país que quiere ser respetado en el mundo, tiene que respetar también la libertad de prensa”.
Y como si la situación no fuera ya crítica, Irán le dio un inesperado giro al problema: la señora Aschtiani anunció este 1° de enero en televisión querer demandar a los periodistas alemanes por haber “manchado su nombre y el de Irán”.
Autores: Christian Walz / José Ospina-Valencia/ dpa
Editor: Enrique López