¿Ciberguerra contra el narco?
2 de noviembre de 2011“¿Tenemos miedo? Claro. ¿Tememos por nuestras vidas? Evidentemente. No obstante creemos que es tiempo de decir alto y basta a la terrible situación provocada por la falsedad de los gobiernos y la falta de escrúpulos de personas a las que no les importa el bienestar de sus congéneres y han provocado una situación de ruina y desencanto en lugares como México…”
Así reza la declaración que hace el grupo Anonymous en su blog de acciones para Iberoamérica. A pesar de rumores de la cancelación de la Operación Cártel (#OpCartel en la jerga de Twitter), los “hackers” parecen estar dispuestos a seguir con su plan. Hasta sus últimas consecuencias.
La acción comenzó con la publicación de un video anónimo en Internet donde se responsabilizaba a los Zetas del secuestro de un activista de Anonymous, amenazando con publicar nombres de personas relacionadas con el cartel entre los que se encontrarían periodistas, policías y taxistas. “Nosotros no podemos defendernos con un arma. Pero podemos hacerlo con sus coches, casas… No será difícil. Sabemos donde se encuentran”, aclara la figura en el video sentando un precedente con una “declaración de guerra” a una de las versiones más brutales del crimen organizado.
No es un juego.
Consciente del riesgo de la acción, la organización recomienda abstenerse a activistas que no estén lo suficientemente seguros de sus habilidades de permanecer en el anonimato. “Esto no es un videojuego. Es una operación riesgosa en la que peligra tu vida y la de los tuyos”, apunta la organización en su blog.
Sin embargo, lejos de poner únicamente en peligro a sus propios militantes, en caso de seguir adelante podría provocar una reacción mucho menos previsible. Sobre todo porque ni siquiera se sabe a ciencia cierta quién está realmente detrás de una acción tan “anónima”.
Primero porque no se puede asegurar que la información revelada sea cierta. Pero también porque “la simple distribución de información sobre los miembros no impide las operaciones de los cárteles. Eso sí, si Anonymous cumple su amenaza, podría afectar a los supuestos colaboradores del cartel que se convertirían en objetivos de represalias de otros carteles rivales”, analiza la agencia global de inteligencia Stratfor advirtiendo también sobre posibles represalias del narco contra bloggers o activistas online a modo de aviso.
Sea como sea, acciones como éstas traerán cola en el futuro en referencia a la información en la red. Una masa anónima cibernética ataca a otra masa anónima poniendo nombre y apellidos. Mientras tanto, nadie sabe siquiera quién está detrás de todo pero cualquiera puede comentarlo y distribuirlo en Twitter o Facebook. Y cómo apuntaban voces críticas en Twitter, como el periodista @longdrivesouth o el blogger @ThinkMexican, no se puede verificar y la historia incluso podría haber sido fabricada.
Autor: Jose A. Gayarre
Editor: Rosa Muñoz