Chatzimarkakis: "Una bofetada para Atenas"
23 de julio de 2012El ministro alemán de economía Philipp Rösler no parece confiar mucho en Grecia. Él no cree que Atenas pueda mantenerse en la eurozona. ¿Piensa usted lo mismo?
De ninguna manera. No es muy oportuno expresarse así, justo un día antes de que la troika (Unión Europea, Banco Central Europeo y Fondo Monetario Internacional) regresara a Atenas para informarse del estado de las cosas. Un vicecanciller no debiera actuar así. Un vicecanciller no puede dar por perdida a Grecia, antes de que haya un resultado.
Pero Philipp Rösler no es el único. Las críticas a la estrategia griega arrecian. El FMI no quiere conceder más créditos que los pactados. La situación es cada vez más seria.
Se está generando tanta presión y se están haciendo tantas demandas a los griegos que al final no va a haber otro camino que la disolución de la zona euro, porque con la salida de Grecia la crisis no va a parar. Si un país abandona la eurozona, otros le seguirán. La situación en España se agrava y en Italia tampoco mejoran las cosas. Todos los que presionan, llevan a Alemania, como a los demás que viven de las exportaciones, a una zona euro dividida. Tendremos una zona de moneda débil y otra de moneda fuerte. ¡Lo hubiéramos podido impedir, pero no lo hicimos!
¿Es posible que tanto una Grecia sin euro como la eurozona sigan existiendo?
Grecia no puede ser obligada a salir de la zona euro. Tiene que ser una salida voluntaria. Si Grecia es obligada a ello, se pierde la confianza en el futuro de la eurozona. Estoy seguro de que si la presión sobre Grecia aumenta, ello ocasionará una disolución de la eurozona. Los que así lo quieran, tendrán que asumir la responsabilidad.
¿Cómo perciben los griegos estas malas noticias?
Me encuentro en Grecia y puedo decir que el mensaje del Señor Rösler es discutido intensamente y causa miedo. Lo que aquí no se ha comprendido es el momento de la declaración del ministro alemán, un día antes de la llegada de la troika. La canciller (Angela Merkel) y el ministro alemán de Finanzas saben por qué no dirían algo así. El vicecanciller decidió hacerlo y causará reacciones. Los políticos griegos luchan por implementar rápidamente las medidas que, desafortunadamente, no se tomaron durante la reciente campaña política. Las palabras del liberal Rösler son un golpe, especialmente al ministro griego de finanzas, Stournaras, que está haciendo todo por poner las cosas en orden.
Hay que recordar que el primer ministro Samaras ha utilizado la fuerza policial y militar contra los huelguistas de uno de los principales sectores industriales. Eso era antes impensable. El nuevo Gobierno me ha sorprendido positivamente porque lucha, de verdad, por implementar las reformas. Por eso considero irresponsable que alguien en Alemania, el país más influyente de la eurozona y también el que más depende de ella, haga tales comentarios.
La troika estudiará el avance de las reformas en Grecia. ¿Es suficiente lo que ha hecho Atenas? Algunos dicen que no.
No he dicho que las reformas hayan avanzado lo suficiente. He dicho que durante el tiempo de campaña las medidas estuvieron paralizadas. Pero el Gobierno ha dado pasos sorprendentes. El país necesita esas reformas. Fue una irresponsabilidad de los griegos haber rechazado, a priori, el paquete de reformas. Muchas reformas son vitales, como la privatización y los recortes del sector público. Ahora que las reformas están siendo adelantadas, se les debería dar más tiempo a los griegos. Pero la troika tendrá en cuenta lo que ha sucedido en los últimos días. Por eso se debió esperar su reporte, antes de hacer comentarios tan duros como el del ministro alemán de economía.
El político Georgios "Jorgo" Chatzimarkakis (nació en 21 de abril de 1966 en Duisburg, Alemania) y es diputado del Parlamento Europeo desde 2004. Este político germano-griego pertenece a la Alianza de los liberales y demócratas por Europa (ALDE).
Autor: Ralf Bosen /JOV
Editora: Claudia Herrera Pahl