Brasil: “Cunha actuó motivado por intereses personales”
3 de diciembre de 2015Tras la petición de juicio aceptada por el presidente de la Cámara de los Diputados, Eduardo Cunha, que asegura que Rousseff incurrió en "delitos de responsabilidad" al avalar una serie de maniobras para maquillar las cuentas fiscales de este año, diputados del Partido de los Trabajadores (PT), formación de la presidenta brasileña, Dilma Rousseff, pidieron hoy (03.12.2015) a la Corte Suprema que anule la decisión de promover un juicio político contra la mandataria.
El PT argumenta que el jefe de la Cámara de los Diputados actuó "sin ninguna finalidad pública", sino motivado por "intereses personales", e incurrió así en lo que las leyes califican como "desvío de funciones", dijo a los periodistas el diputado Wadih Damous tras entregar la demanda en la sede del Supremo Tribunal Federal.
El diputado Paulo Teixeira, quien también pertenece al PT y firma la solicitud presentada ante el Supremo, afirmó que las acusaciones que pesan en contra de Cunha le restan "toda la legitimidad a ese intento de quitarle el mandato a una presidenta elegida por los brasileños". Según el diputado Damous, Cunha intenta "usar" la posibilidad de un juicio contra la mandataria "para desviar el foco de la opinión pública".
Cunha enfrenta varias acusaciones en el marco del escándalo de corrupción descubierto en Petrobras y, además de un proceso en el Consejo de Ética, recientemente la Fiscalía abrió una investigación por unas cuentas bancarias nunca declaradas que le descubrió en el exterior y que al parecer recibieron depósitos de recursos desviados de la petrolera.
Cunha, por su parte, sostiene que analizó el caso sobre la base de preceptos constitucionales.
Intercambio de acusaciones
Cunha también aseguró que emisarios del Gobierno buscaron un acuerdo mediante el cual ellos le apoyaban en las investigaciones sobre sus supuestas implicaciones en las corruptelas detectadas en Petrobras, a cambio de que él no aceptara que la presidenta fuera juzgada.
El ministro de la Presidencia, Jacques Wagner, rechazó en forma tajante las afirmaciones de Cunha, negó que haya habido algún tipo de negociación de esa naturaleza y puso en duda que el proceso vaya a avanzar en el Congreso, del que depende su continuidad.
"Ahora acaba todo tipo de chantaje"
Wagner dijo que el presidente de la Cámara de los Diputados venía amenazando públicamente con autorizar la apertura del juicio en caso de que sus intereses fueran contrariados y finalmente cumplió. "Ahora acaba todo tipo de chantaje. Él amenazaba que si no lo apoyaban, autorizaría el juicio. Todo el mundo sabe eso", aseguró.
En su opinión, la oposición, que aún no se conforma con la derrota que sufrió en las elecciones presidenciales de 2014, pasó todo 2015 buscando un motivo para justificar un juicio contra la mandataria y finalmente optó por una "artificialidad".
Wagner agregó que Brasil no puede rendirse a alguien como Cunha, que "usa su propio poder para paralizar el país y para paralizar el Congreso, siempre con la herramienta de la amenaza. Siempre amenazando para conquistar lo que quiere".
Cunha pertenece a un partido de la coalición de gobierno, pero hace tiempo se pasó a la oposición en forma "personal", sin salir de su fuerza política.
FEW (EFE, Reuters)