Bolivia: aumenta la violencia contra mujeres
7 de noviembre de 2014En una sociedad patriarcal como la de Bolivia para muchos hombres golpear a la esposa o a la novia es la manera habitual de resolver un conflicto: someter para disciplinar. Y lejos de sorprenderlas, este comportamiento para muchas mujeres es el habitual, el que se ha repetido y heredado de generación en generación. "Mujeres de la edad de mi abuela o mi madre aún creen que es natural que el hombre tenga control sobre el cuerpo y la vida de una mujer", afirma Lourdes Montero, Coordinadora de economía y equidad de Oxfam en Bolivia.
Luego de ser víctima de un novio violento en la universidad, Lourdes decidió convertirse en activista por los derechos de las mujeres, hace ya más de 20 años. Hoy ayuda a coordinar la campaña nacional "Hasta que la muerte nos separe", que presenta alarmantes números: 175 feminicidios se han registrado en Bolivia tan sólo en lo que va de este año. Estos datos brindados por el Centro de Información y Desarrollo de la Mujer CIDEM revelan que en Bolivia aproximadamente cada tres días una mujer es asesinada por su pareja sentimental.
Esta violencia extrema también se refleja en el estudio más reciente de la Organización Panamericana de la Salud (OPS). La investigación realizada en 12 países de América Latina y el Caribe revela que Bolivia es el país con el mayor porcentaje de mujeres víctimas de la violencia. Más del 53 por ciento de las mujeres de entre 15 y 49 años declararon haber sufrido alguna forma de agresión física o sexual por parte de sus parejas. En comparación, Colombia y Perú llegan a casi un 40 por ciento, y Ecuador, a un 32 por ciento. Casi todas las mujeres que aseguraron haber sufrido violencia por parte de su compañero íntimo, atribuyen el desencadenamiento de los hechos al consumo de alcohol o algún otro tipo de droga por parte de su pareja.
Más casos de violaciones a menores
En las últimas semanas, varios casos de violaciones a niñas menores de edad han escandalizado a la población boliviana y reavivado la discusión alrededor del tema. Luego de que en el municipio de Palos Blancos, La Paz, se hallara el cuerpo sin vida de una pequeña de apenas cuatro años, que había sido previamente golpeada y violada, el Defensor del Pueblo de Bolivia, Rolando Villena se mostró indignado. "Los casos de feminicidio y violencia contra las niñas siguen aumentando y son cada vez más crueles" dijo en entrevista con Deutsche Welle. Pocos días antes, una pequeña de cinco años fue violada en un centro de salud de Cochabamba por uno de los enfermeros. Estos casos se suman a las más de cuatrocientas denuncias por violación a niñas de entre cero y 17 años de edad que se recibieron hasta agosto de este año. Según las estadísticas oficiales de la Defensoría del Pueblo, el 34 por ciento de las niñas en Bolivia son violadas antes de cumplir los 18 años.
"Hay muchos problemas entre la extrema pobreza y las graves contradicciones que genera la economía informal, el contrabando, entre otros aspectos", asegura el Defensor Villena. "Esto conlleva a una pérdida sistemática de valores. Las familias no están dando la atención prioritaria al cuidado y la protección de sus hijos". Villena además está convencido de que es necesario que el Ejecutivo nacional declare un estado de alerta máxima en todo el país que genere una "acción urgente y efectiva de prevención, protección y cuidado" para combatir la violencia contra mujeres y niñas.
Las leyes solas no bastan
En marzo de 2013, el gobierno de Evo Morales aprobó la "Ley Integral para Garantizar a las Mujeres una Vida Libre de Violencia". Esta ley reconoce 17 formas de violencia y establece una pena de 30 años de prisión sin derecho a indulto por el delito de feminicidio. Sin embargo, hace apenas un mes que se aprobó el reglamento necesario para liberar recursos económicos que puedan ser usados para implementarla. "En un país como Bolivia, en donde no necesariamente existen las instituciones requeridas para hacer cumplir la ley, esta nueva ley se convierte sólo en una expresión de buenos propósitos por parte del gobierno y del estado", critica la activista Lourdes Montero.
Prueba de ello es que de las más de 17 mil denuncias que registró el CIDEM en 2013, hasta ahora sólo tres casos han recibido una sentencia. Es por ello que campañas como "Hasta que la muerte nos separe" enfocan sus esfuerzos en concientizar y sensibilizar a la sociedad. "De nada sirve un marco jurídico que penalice a los agresores, si la sociedad sigue tolerando la violencia en contra de las mujeres", opina Lourdes. El principal público objetivo de la campaña son adolescentes y jóvenes que apenas comienzan con una vida sexual y afectiva, para que "no copien los patrones impuestos por una sociedad machista", dice Lourdes. Cada vez más mujeres bolivianas buscan una vida autónoma e independiente, quieren trabajar y tener menos hijos, pero aún queda mucho por hacer "para que los hombres acepten que sus vidas no les pertenecen."