Berlusconi obtiene buen resultado en elecciones regionales
30 de marzo de 2010Las elecciones se llevaron a cabo en 13 de las 20 regiones italianas, siendo las más importantes antes de que en 2013 el multimillonario primer ministro finalice su mandato de cinco años.
Las últimas previsiones del lunes, emitidas por televisión y basadas en el casi completo escrutinio de los votos, mostraban que la coalición conservadora de Berlusconi, el Pueblo de la Libertad (PDL) le había arrebatado al menos tres regiones al centro-izquierda.
A sus 73 años, el primer ministro consiguió difuminar los escándalos recientes en los que están implicados él y algunos de sus aliados, como las escuchas telefónicas, gracias a una campaña en la que recorrió Italia poniéndose por delante.
Berlusconi recurrió a su argumento de que el escándalo de las escuchas y las filtraciones a la prensa han sido el último intento de los magistrados de izquierda para perjudicar su imagen, y apeló encarecidamente a sus electores para que acudieran en masa a las urnas. Tal vez Berlusconi haya prestado atención al distanciamiento de los votantes en la vecina Francia, donde recientemente el presidente, Nicolas Sarkozy, sufrió un varapalo importante, también en unas elecciones regionales.
Y es que la cita con las urnas se ha producido en un momento en el que las encuestas hablan de una caída de popularidad del primer ministro a causa de los escándalos de corrupción y del creciente desempleo.
La participación fue baja. Según datos del Ministerio del Interior, en torno a un 64 por ciento de los 41 millones de electores habían acudido a las urnas, un ocho por ciento menos que en las elecciones regionales de hace cinco años.
Sin embargo, el centro-izquierda no es capaz de capitalizar el creciente y amplio desencanto de la gente con la clase política. "La centro-derecha ha ganado", afirmó Antonio Di Pietro, del opositor Italia de los Valores, añadiendo que el centro-izquierda, grupo en el que se engloba él, es "incapaz de atraer a aquellos que se abstienen".
Los analistas italianos predijeron que los conservadores sólo podrían estar seguros de retener en sus manos las dos regiones que tradicionalmente son suyas: el Veneto y Lombardía. Esto se produciría a expensas de la pérdida de votos por parte del PDL en favor de su compañero de coalición, la Liga Norte, cuya influencia crece cada vez más.
La Liga Norte consiguió el año pasado imponer con éxito al gobierno su agenda antiinmigración y de lucha contra el crimen.
Los resultados confirman que la Liga Norte se afianza como partido más votado en el Veneto, aunque el PDL sacó más votos en Lombardía, en cuyo territorio está Milán, la capital financiera de Italia.
Pero quizás, para Berlusconi, sea más importante que sus candidatos le han arrancado el control de las regiones meriodionales, Calabria y Campania, al centro-izquierda.
Los resultados de Campania, en particular, son vistos como reivindicación personal del primer ministro, pues su fama en la región llegó cuando consiguió resolver la crisis de la basura en Nápoles, pocos meses después de su elección en 2008.
Se ha comentado que estas elecciones eran el primer examen también para el partido principal del centro-izquierda italiano y su nuevo líder, el Partido Demócrata (PD), de Luigi Bersani.
El PD, una complicada fusión entre los comunistas y los católicos moderados, logró mantener sus tradicionales feudos de Toscana y Regio Emilia.
Pero el centro-izquierda, en cualquier caso, también disminuyó sus apoyos después de su éxito de 2005 cuando ganó 12 de las 14 regiones en liza, en unas elecciones que resultaron ser el preludio de su victoria sobre el centro-derecha un año después, en 2006.
DPA
Editor: Enrique López