Moción contra Berlusconi
13 de diciembre de 2010"Ante todo estamos llamados a cooperar de forma constructiva para ser justos con la confianza depositada en nosotros por parte de los electores", apeló Silvio Berlusconi a los diputados italianos que este martes han de votar la moción de censura presentada en contra del primer ministro. Todo lo demás, dijo el jefe de Gobierno en una declaración ante el Senado, sería una muestra de "irresponsabilidad".
Los parlamentarios a los que Berlusconi exige ahora colaboración son los mismos a los que en otros tiempos prestó tan poca atención. A las fuerzas moderadas de la Cámara baja les propone ahora un pacto con el que llevar a su fin estipulado el actual periodo legislativo, que debería acabar en 2013. A cambio, el premier está dispuesto a reforzar su equipo y a iniciar "una nueva fase". Italia necesita un Gobierno estable, insistió. La alternativa son elecciones anticipadas.
Entre antiguos amigos
Una crisis de Gobierno en medio de las actuales adversidades económicas sería una locura, advirtió Berlusconi. Contra quienes pretenden arrojar al país a un "torbellino de degradación", dijo el italiano, se ha de volver a unir el conjunto de las fuerzas moderadas.
Hasta el último minuto trata Berlusconi de blindarse ante la moción de censura a la que se enfrenta su Ejecutivo. Especialmente el guiño va dirigido a UDC, el pequeño partido de centro que lidera Pier Ferdinando Casinis, pero también al grupo FLI (Futuro y Libertad para Italia), cuyos miembros siguieron al expulsado Gianfranco Fini y abandonaron hace unos meses la coalición gubernamental, dejándola tambaleante y sin mayoría parlamentaria.
A sus antiguos compañeros de filas instó Berlusconi a "no arrojar lo que hemos construido juntos". Al fin y al cabo, los diputados en torno a Fini fueron elegidos en 2008 a través del Pueblo de la Libertad de Berlusconi, les recordó el acorralado primer ministro. Ahora, subrayó, no pueden traicionar a sus electores cambiándose a la izquierda.
Y si pierde, ¿qué?
Fiel a Berlusconi permanece Umberto Bossi, líder de la ultraderechista Liga Norte, que calificó de "excelente y equilibrado” el discurso del jefe de Gobierno y dio por hecho que obtendrá la confianza del Congreso. "Pero con sólo un voto más no se gobierna, y si no se puede gobernar, hay que ir a votar", advirtió, sin embargo, Bossi. De unas elecciones anticipadas podría salir su Liga muy beneficiada.
El resultado de la votación en la Cámara de Diputados es incierto. Si la mayoría aprueba la moción, Berlusconi debería dimitir, aunque también es posible que en tal caso el presidente italiano, Giorgio Napolitano, le encargue la formación de un nuevo Gobierno. El Senado, entre tanto, votará poco antes, también el martes, una moción de confianza presentada por el propio Berlusconi. Una dimisión no entra en sus planes del premier, ha advertido ya. Si pierde la moción de censura, se convocarán nuevos comicios. (dpa)
Editora: Luna Bolívar Manaut