Baviera lanza desesperado intento por frenar al coronavirus
19 de octubre de 2020Las autoridades de Baviera decidieron tomar drásticas medidas para frenar el escalofriante aumento de los casos en el distrito de Berchtesgadener Land, en el sur de Alemania. Básicamente nadie podrá salir de sus casas sin una razón justificada. Se trata de un intento desesperado por controlar una situación que parece estar saliéndose de su cauce. La localidad tiene una tasa de contagios de 272 por cada 100.000 habitantes, por lejos el récord del país.
Las medidas fueron anunciadas por la ministra bávara de Agricultura, Michaela Kaniber (CSU), empezarán a regir este martes 20 de octubre a las 14.00 horas y se extenderán por 14 días. Entre ellas se cuentan una limitación de las salidas de casa, restringidas a partir de ahora solo a labores profesionales, visitas médicas, compras o realización de ejercicio al aire libre. Escuelas y guarderías estarán cerradas, al igual que restaurantes, cines, teatros, gimnasios y hoteles, que solo permitirán pernoctaciones a viajeros de negocios. Toda actividad masiva estará estrictamente prohibida, con la excepción de los servicios religiosos, importantes en una zona especialmente devota como Baviera.
También será obligatorio el uso de mascarillas en zonas peatonales, aparte de la exigencia del cubrebocas en los recintos cerrados. Este confinamiento es el primero que se aplica en Baviera en varios meses y replica buena parte de las medidas adoptadas durante la primera ola en toda Alemania. El ministro presidente del estado federado, Markus Söder, había adelantado que habría drásticas decisiones para el distrito de Berchtesgadener Land, que se ha convertido en un epicentro de contagios y en la zona más afectada por la diseminación del coronavirus en el país.
"Serán las medidas más estrictas que se puedan aplicar”, adelantó. "No hay otra fórmula, ya no podemos rastrear los contactos, por ello estos deben ser estrictamente restringidos”, explicó Söder. Las autoridades estiman que la ola de contagios se desató por una fiesta.
Rápido aumento de casos
La policía vigilará con celo el cumplimiento de las normas, advirtió Söder. "Asumimos que el 90 por ciento de la ciudadanía de apegará a las normas, pero también hay algunos que no lo harán”, explicó, señalando a las fiestas ilegales como las principales enemigas en la lucha contra el coronavirus. Lo ocurrido en el sur del país es visto con atención en toda Alemania, que pronto podría verse forzada a confinar a su población para evitar un aumento de los casos, que en las últimas semanas se han incrementado a enorme velocidad. En el conjunto del país, la incidencia se situaba el domingo en 42,9 casos por cada 100.000 habitantes.
Hasta hace solo una semana, el país contaba entre 2.000 y 2.500 casos diarios. Sin embargo, el jueves los nuevos contagios sumaron 6.638, el viernes 7.334 y el sábado 7.830, el récord desde que comenzó la pandemia. El anterior máximo se había registrado el 28 de marzo, con 6.294 contagios. Las cifras fueron bajando después, hasta situarse en entre 300 y 350 en junio, y a partir de finales de julio aumentaron de nuevo; en agosto se volvieron a superar por primera vez los 2.000 nuevos contagios diarios.
DZC (Der Tagesspiegel, EFE, BR24)