"Basta de pasar gato por liebre"
4 de julio de 2004Colorida y llamativa fue la marcha de homosexuales y lesbianas que, con sus aproximadamente 90 carros alegóricos, atrajeron a cerca de un millón de espectadores en Colonia. Pero no se trata sólo de una fiesta en que dar rienda suelta al baile y la música o lucir atuendos provocativos, sino también de una manifestación de índole política.
Reclamos de igualdad
"Iguales derechos a iguales obligaciones. Sólo eso es justo", señalaba, por ejemplo, la pancarta colocada sobre el carro de la Asociación de Homosexuales y Lesbianas. Su portavoz, Philipp Braun, lamentó que este grupo aún no goce de una protección efectiva de la discriminación. Aseguró que en esta sociedad, aparentemente liberal, todavía padecen problemas y humillaciones que, a su juicio, son un "veneno para la convivencia social".
El lema del desfile de este año fue: "Basta de pasar gato por liebre". La crítica de los participantes apunta al hecho de que, a pesar de que ahora cuentan con la posibilidad de registrarse legalmente como pareja, los homosexuales aún están en una situación de desventaja con respecto a los matrimonios heterosexuales. Por ejemplo, en caso de muerte de una de las partes, el sobreviviente no tiene derecho a recibir pagos del seguro de jubilación del fallecido. También en el aspecto tributario carecen de las ventajas de los matrimonios, ya que deben pagar las tasas de impuestos correspondientes a los solteros.
El problema de la adopción
Otro punto que los homosexuales quisieran cambiar es el relativo a las adopciones. De acuerdo con las leyes alemanas, también ellos pueden adoptar niños, pero como personas individuales. Es decir, no pueden hacerlo en pareja. En consecuencia, uno de ellos siempre será el "padrastro" o "madrastra" del hijo adoptivo.
La lista de reclamaciones es larga y no sólo se refiere al aspecto legal. También en el plano personal muchos homosexuales siguen sintiéndose marginados de una sociedad que a veces los acepta como un fenómeno "curioso", pero sin darles real cabida. Y eso es algo que intentan dejar de manifiesto en ocasiones como ésta, en que la fiesta tiene un trasfondo más serio, pese al ambiente de carnaval que inundó este domingo las calles de Colonia.