Ayuda a Ucrania, amenazada por húngaros y republicanos
12 de diciembre de 2023Su viaje al continente americano está siendo bastante incómodo para Volodimir Zelenski: el domingo, el presidente ucraniano asistió a la toma de posesión del nuevo jefe de Estado argentino, Javier Milei. Coincidió en una fila de asientos nada más y nada menos que con el primer ministro húngaro, Viktor Orbán. En internet, circula un video de 21 segundos de una conversación entre ambos estadistas. No se escuchan sus palabras, pero el lenguaje corporal lo deja claro: incluso en la lejana Buenos Aires, Ucrania y Hungría no se entienden.
Ambos interlocutores intentaron aclarar luego la escena. Zelenski aseguró que había explicado a Orbán los intereses europeos de Ucrania "lo más abiertamente posible". Mientras el portavoz del primer ministro húngaro afirmó que Orbán había informado a Zelenski de las "continuas discusiones" entre representantes de la UE sobre la posible adhesión de Ucrania.
Este jueves y viernes (14 y 15 de diciembre), los jefes de Estado y de Gobierno de la UE quieren discutir, entre otras cosas, otro paquete de ayuda de 50.000 millones de euros y el inicio de negociaciones formales de adhesión con Ucrania. Pero Hungría amenazó recientemente incluso con un veto.
Ucrania en una situación difícil
En este segundo invierno de guerra, Ucrania se encuentra quizás en la situación más difícil desde el inicio de la invasión rusa en febrero de 2022: militarmente, los últimos meses han traído más desgaste que ganancias en territorio. Esposas y familiares de soldados protestaron recientemente en Kiev para reclamar un descanso más prolongado del frente tras de 21 meses de guerra.
El presidente Zelenski enfrenta críticas internas, incluidas las del alcalde de Kiev, Vitali Klitschko. Y aunque la atención del mundo se ha desplazado en gran medida de Ucrania a Gaza, la promesa de más armas y paquetes de ayuda -probablemente vitales para la supervivencia de Ucrania- también se desmorona.
En medio de todo esto, Hungría ha tomado partido activamente contra la prolongación de la ayuda militar. Los motivos de Viktor Orbán, quien hace apenas un mes se dejó elogiar por sus "buenas relaciones" con el presidente ruso Vladimir Putin, no están claros. "El único sentido en el que puedo interpretar la posición de Hungría sobre la cuestión de Ucrania y muchas otras es que está en contra de Europa y en contra de todo lo que Europa representa", dijo el ministro de Exteriores de Lituania, Gabrielius Landsbergis.
Orbán con ventaja en la cumbre de la UE
Como "muy peligrosas" califica Markus Kaim, investigador de la Fundación Política y Seguridad (SWP), las amenazas de Orbán, en vísperas de la cumbre de la UE. La próxima decisión del Consejo depende del principio de unanimidad: "Si Orbán se cierra a las perspectivas de adhesión de Ucrania, los demás podrán hacer poco. Por eso, él tiene el sartén por el mango, directa e indirectamente", dice Kaim a DW
Si no hay una decisión positiva, sería extremadamente desmotivador para el pueblo de Ucrania, advirtió el ministro de Exteriores, Dmitro Kuleba, al margen de una reunión con sus homólogos de la UE en Bruselas.
Los ministros de Exteriores de la UE aprobaron finalmente una propuesta de la Comisión de Europea para transferir 900 millones de euros a Hungría, sin condiciones previas, para hacer frente a la crisis energética. Markus Kaim ve esto como una oportunidad para llegar a un acuerdo, según el cual Hungría podría, a cambio, apoyar el próximo paquete de ayuda a Ucrania en la cumbre de la UE de finales de esta semana. "Si fuera necesario, se podría posponer la cuestión del estatus de candidato a la adhesión a la UE", destaca Kaim.
Apoyo inestable de Estados Unidos
Pero Hungría parece estar presionando también contra la ayuda a Ucrania en otro escenario político: según el diario periódico británico The Guardian, diplomáticos húngaros querían reunirse con políticos del Partido Republicano en Washington a principios de esta semana. Volodimir Zelenski también tiene previsto reunirse con los republicanos encabezados por el líder de la Cámara de Representantes, Mike Johnson, de quien depende un mayor apoyo a Ucrania.
Tras el encuentro con Orbán en Buenos Aires, este podría ser un segundo debate incómodo para Zelenski, en su viaje a Estados Unidos: casi once meses antes de las elecciones para la presidencia estadounidense, la Cámara de Representantes y un tercio del Senado, Donald Trump y su facción "MAGA" ("make America great again") están marcando el rumbo del partido republicano: son hostiles a la ayuda masiva de la administración de Joe Biden a Ucrania.
Biden ya había solicitado un nuevo tramo al Congreso en octubre, pero, hasta ahora, la aprobación o incluso un presupuesto regular han fracasado por culpa de los republicanos. Además de 61.000 millones de dólares (unos 56.600 millones de euros) para Ucrania, el paquete también incluye ayuda para Israel y un trato más restrictivo para los inmigrantes en la frontera sur de Estados Unidos. Sin embargo, los republicanos piden un ajuste de mayor alcance.
Biden "podría romper fácilmente el nudo gordiano diciéndoles a los republicanos: Los complaceré en la legislación migratoria", dice el científico del SWP Markus Kaim. "Pero él no quiere eso".
"Primera señal" ante la posible elección de Trump
Sigue siendo incierto si Zelenski podrá lograr un cambio en Washington o si los republicanos mantendrán su rotundo no al apoyo a Ucrania. "Europa se vería desafiada", afirma Kaim: "Sería la primera senal de lo que muchos temen tras una reelección de Donald Trump: Estados Unidos ya no será el garante del orden de seguridad internacional. Así que habría que reajustar la repartición de la carga entre los EE.UU. y Europa".
Un "no" final de los republicanos en Washington o un veto de Hungría en la cumbre de la UE ciertamente aumentarían aún más las preocupaciones de Ucrania. La ministra de Estado alemana para Europa, Anna Lührmann, que acudió a la reunión de ministros de Exteriores de la UE en lugar de la titular de Exteriores Annalena Baerbock, que asistía a la conferencia mundial sobre el clima, ya ha anunciado que Alemania duplicará el apoyo militar a Ucrania para 2024, de cuatro a ocho mil millones.
(rml/ers)