Atacama: el desierto florece
En algunos años, la naturaleza ofrece un espectáculo singular en el norte de Chile: el desierto de Atacama se convierte en un mar de flores. Aquí les ofrecemos algunas imágenes del desierto florido.
Las flores del desierto
En años en que ha habido precipitaciones, como este 2021, las semillas que se conservan latentes en este árido paraje del norte de Chile comienzan a brotar en la primavera. En un corto lapso, inumerables flores y hierbas dan vida y color al desierto de Atacama.
El Niño lleva vida al desierto
Este espectáculo de la naturaleza se ve favorecido por el fenómeno de El Niño: la corriente marina cálida se acerca a la costa y la neblina, que en general se evapora rápidamente, adquiere una mayor carga de humedad, que arrastra hasta el interior del desierto.
Turismo perjudicial
El espectáculo multicolor se puede apreciar en toda su plenitud en la zona desde el norte de la ciudad de Vallenar hasta el norte de Copiapó, tanto en la costa como en el interior. Organizaciones defensoras del medioambiente advierten del impacto negativo del turismo en el potencial regenerativo de las plantas. Cada vez más gente acude a ver el desierto florido.
No todos los años
El desierto de Atacama, el más árido del mundo, sorprende con su alfombra floral solo una vez cada cinco o siete años. La última vez que había habido gran profusión de flores fue en octubre de 2015, cuando fue tomada esta fotografía.
Una flora única en el mundo
La mayor parte de las más de 200 especies vegetales son endémicas. Y existen únicamente en esta región. Solo plantas que se han adaptado a esas condiciones climáticas extremas logran sobrevivir en esos parajes. Prevalecen la garra de león (Bomarea ovallei), la pata de guanaco (Calandrinia longiscapa) y la añañuca amarilla (Rhodophiala bagnoldii).