Arturo Vidal ahora es clave para el Bayern
15 de marzo de 2016Para Arturo Vidal el 2016 no empezó sonriendo. El chileno estuvo sentado en el banco de suplentes del Bayern en los primeros partidos del año. La situación se interpretó en Alemania como una sanción del entrenador Pep Guardiola al jugador por sus presuntas escapadas nocturnas para irse de copas y fiesta durante la concentración invernal del prestigioso club alemán en Catar.
Y aunque las directivas del Bayern, y el propio futbolista, desmintieron vehemente la información, a la prensa alemana no le ha tocado retractarse de lo publicado. Por eso, desde entonces, al nombre de Arturo Vidal nuevamente lo rodea un aura de indisciplina e irresponsabilidad. Y si bien el chileno no ha logrado sacudirse definitivamente de los dimes y diretes, en la cancha tampoco ha perdido ninguna oportunidad de las que se le han ofrecido para ratificar su vasto valor deportivo.
Solución a la crisis
Desde su llegada a Múnich, la figura del campeón de la Copa América fue objeto de discusiones, especialmente luego de que Pep Guardiola dejara entrever que Vidal no fue un fichaje suyo, sino del club. El entrenador dio a entender que más que creer en el chileno, estaba obligado a arreglárselas con él.
Y aunque Vidal jugó regularmente desde el inicio de la temporada, las reservas alrededor de la calidad e importancia de su aporte al equipo no desparecían. Aún así, a su favor se puso la mala fortuna del Bayern. La hora del chileno llegó cuando el equipo vio caer uno tras otro, como fichas de domino, a sus baluartes defensivos (Jerome Boateng, Javi Martínez, Holger Badstuber y Medhi Benatia).
Guardiola, sin defensas centrales, se vio obligado a improvisar. En esa posición el entrenador formó a dos jóvenes inexpertos (Joshua Kimmich y David Alaba) que han sorprendido por la eficiente forma en la que han cumplido esa tarea. Y cuando se evalúa el éxito de Kimmich y Alaba, hay que mencionar a Arturo Vidal como el que le permite brillar a sus compañeros.
La energía que despliega el chileno a lo largo y ancho del mediocampo, la fortaleza y decisión con la que va a la pelea por el balón, la astucia con la que se apodera de los espacios peligrosos, y la vivacidad con la que le cubre la espalda de sus colegas de equipo, han hecho posible que un equipo como el Bayern no sufra pese a no tener defensa. Aún mejor, gracias a Arturo Vidal el club alemán no solo mantiene su nivel de rendimiento, sino que tácticamente lo enriquece.
Un delantero más
El peso de Arturo Vidal en el Bayern actual se ha elevado tanto, que ahora Guardiola también le ha traspasado responsabilidades ofensivas. El entrenador, explotando la presencia y condición física del futbolista sudamericano, lo ha convertido en el arma sorpresa en el ataque. El mediocampista defensivo se transforma a espaldas de los rivales en una especie de “falso 9”.
Las defensas enemigas, ocupadas con el empeño de controlar a los goleadores Robert Lewandowski y Thomas Müller, y agobiadas con el esfuerzo de frenar las veloces y furiosas andanadas de Douglas Costa, Franck Ribery, Arjen Robben o Kingsley Coman por las bandas, pierden usualmente de vista a Arturo Vidal cuando el Bayern ataca. Esta situación le permite al chileno filtrarse por los espacios libres y ofrecerse como estación de los pases peligrosos dentro y fuera del área rival. Esta opción táctica aún no se traduce en goles, aunque si eleva la intensidad de la presión bávara que termina arrollando y doblegando al contrario.
En el segundo partido de los octavos de final de la Champions League (16.03.16) contra su exclub, Juventus, Arturo Vidal será la pieza clave del Bayern. En este partido en el Allianz Arena el chileno podrá hacer olvidar los cotilleos a su alrededor, y poner en primer plano la calidad futbolística que lo trajo de regreso a la Bundesliga.