Aporte alemán al plan euro aprobado
21 de mayo de 2010El Parlamento alemán, el Bundestag, aprobó la aportación de Alemania al paquete global de estabilidad financiera acordado la semana pasada por la Unión Europea y el Fondo Monetario Internacional por un monto de 750.000 millones de euros.
Alemania contribuirá con un total de hasta 148.000 millones de euros en garantías al paquete global de ayuda a los países con más dificultades de la zona euro.
Un total de 319 diputados votaron a favor de la ley, mientras que 73 lo hicieron en contra y 195 se abstuvieron; 312 votos eran necesarios. El gobierno de Angela Merkel, de la unión conservadora CDU/CSU en coalición con los liberales, logró así sacar adelante la controvertida ley. Sólo la coalición votó a favor: Verdes y socialdemócratas se abstuvieron; Die Linke, La Izquierda, votó en contra. El Bundesrat, la Cámara Alta, dejaba pasar la ley poco después.
“Recuperar la confianza en el euro”
Recuperar la confianza en el euro es, así la canciller Merkel, su principal prioridad. Berlín exige que haya una regulación y fiscalización más dura para proteger a la moneda única, y una acción conjunta de la Unión Europea para retirar los estímulos a sus economías. Los problemas de la zona euro deben ser enfrentados desde sus raíces, declaró la canciller en una conferencia, abogando por que se endurezcan las normas que gobiernan al bloque de la moneda única, mientras el euro se hundía cerca de un 1 por ciento.
En ello habría influido, así información de agencias, la decisión unilateral de Alemania de prohibir las ventas cortas al descubierto –ventas de instrumentos financieros sin haberlos recibido- de algunos instrumentos financieros. Esto dejó en claro las divisiones políticas en Europa.
Francia reacciona molesta a la prohibición de Alemania. "No creo absolutamente que el euro esté en peligro", declaraba hace pocas horas la ministra de Economía francesa, Christine Lagarde; en su opinión "el euro es una moneda sólida y creíble".
Presión del euro, presión interna
Alemania es el principal contribuyente de la UE a un paquete de rescate de 110.000 millones de euros para Grecia y para una red de seguridad financiera de para otras naciones vulnerables de la zona euro.
Por otro lado, el gobierno de Berlín está bajo presión interna: sus electores lo han castigado en las elecciones renanas –las mayores regionales en cuanto a número de votantes- por incumplir sus promesas de reducción de impuestos.
"La principal prioridad es recuperar la confianza en el euro. Esto sólo se alcanzará si las medidas son complementadas con regulación y supervisión. Hay una necesidad aguda de acción", dijo el ministro alemán de Finanzas, Wolfgang Schaeuble.
Los mercados también presionan: están esperando a ver cómo retira la UE las políticas monetarias diseñadas para apoyar a las economías durante la crisis global.
Merkel llamó a una acción coordinada a nivel europeo. "El tema de las estrategias de salida es de gran importancia para nosotros. Francamente, estoy bastante preocupada sobre este asunto. Nos centraremos en una estrategia de salida coordinada en Europa", afirmó.
Entre tanto la moneda euoropea ha vuelto a subir -los inversionistas han reaccionado por temor a una intervención cambiaria: según analistas, se están dando cuenta de los peligros tanto de poseer demasiados como muy pocos euros, particularmente dada la especulación de que las autoridades puedan darle un empujón a la moneda.
En este contexto, antes de una nueva reunión de los ministros europeos de Finanzas en Bruselas, Jean-Claude Juncker afirmaba que no veía la necesidad de tomar medidas inmediatas de intervención para salvar al euro.
Autora: Mirra Banchón/agencias
Editor: José Ospina Valencia