Alemania y Venezuela: relaciones a la baja
3 de diciembre de 2015Mientras los precios del crudo se mantuvieron altos, entre 2004 y 2014, Venezuela registró ingresos fabulosos con los que sobrellevó las distorsiones de su economía. La caída de los precios del crudo exacerbó la situación. La economía se encuentra desde 2014 en recesión, acompañada de una alta inflación, menguantes reservas de divisas, endeudamiento y desabasto, lo que ha provocado descontento social.
“Hace unos años había un gran interés por entrar en el mercado venezolano, la situación actual es tal, que ninguna empresa alemana pensaría en eso ahora. Debido a la situación en los últimos meses, el interés de los empresarios alemanes ha decaído fuertemente“, afirma Simon Balzert, experto de la Asociación Empresarial para América Latina, (LAV). Con sede en Hamburgo, cuenta con unas 400 empresas asociadas de distinto tamaño, cuyo común denominador es su interés en Latinoamérica.
Las exportaciones alemanas al país sudamericano, sobre todo maquinaria y productos químicos alcanzaron en 2013 un valor de 738 millones de euros, mientras que las importaciones provenientes de Venezuela retrocedieron. En 2011 el país caribeño vendió productos por un valor de 749 millones de euros a Alemania. En 2013 fueron de 320 millones de euros. Además de petróleo, que asciende al 71 por ciento de sus exportaciones, Venezuela exporta hierro y acero.
¿Permanecer o abandonar Venezuela?
Sigrid Zirbel, directora para Latinoamérica de la Federación de la Industria Alemana, (BDI) destaca que las relaciones económicas bilaterales han sufrido un retroceso. “Este año, las exportaciones alemanas sufrirán una contracción de 30 por ciento“, afirma. BDI es el techo de 100,000 empresas grandes, medianas y pequeñas agrupadas en 36 asociaciones sectoriales.
“Muchas compañías como Siemens, Bosch, DHL, Bayer, Bohringer Ingelheim, Merck, se encuentran desde hace mucho en Venezuela. Otras, medianas y pequeñas, siguen haciendo negocios desde países vecinos, como Colombia“, destaca Zirbel. Pese a las dificultades que enfrentan, como el rígido control cambiario, las intervenciones del Estado en los controles de precios, en el derecho laboral, las estatizaciones y problemas como corrupción, la experta explica que por lo general las decisiones al asentarse en un país son de largo plazo. “No se van tan rápido cuando las cosas se ponen difíciles“.
Commerzbank es el único banco alemán que tiene una representación en Caracas. “Es el último de nuestros socios del sector bancario que continúa en Venezuela“, afirma Simon Balzert. Según los reportes que le llegan a Hamburgo, la situación ha ido empeorando mes tras mes. “La disyuntiva de las compañías que ya están en el mercado venezolano es sobrellevar la actual crisis con el mínimo de recursos para después volver a la zona de ganancias. Esa es una estrategia mucho más prometedora que la decisión de cerrar y abandonar por completo el mercado para después volver en unos años y comenzar de nuevo“, destaca.
Relaciones políticas escasas
Victor Mijares, investigador del Instituto GIGA, un think-tank con sede en Hamburgo, señala por su parte que las relaciones políticas entre Alemania y Venezuela han sido escasas, por no decir nulas, desde la llegada del chavismo. “En buena medida fue la aportación de los asesores españoles, hoy aglutinados en PODEMOS, que llevaron a Venezuela la idea de la izquierda europea sobre Alemania como un país hegemónico“.
El académico recuerda dos episodios recientes que tensaron las relaciones. “El asesinato de un empresario alemán en un céntrico hotel de Caracas. Viajaba con pasaporte provisional diplomático y se iba a reunir con directivos de la estatal petrolera PDVSA. El otro fue el llamado de atención del Ministerio de Relaciones Exteriores venezolano a la embajada de Alemania en Caracas por publicar advertencias sobre la seguridad y el abastecimiento en el país“. El investigador destaca que Venezuela ha perdido brillo por el pobre desempeño de su economía. “Venezuela ya no es un ejemplo a seguir. Quedó demostrado que su proyecto dependía de los altos precios del petróleo“.