Alemania y Polonia buscan a culpables de desastre en el Óder
13 de agosto de 2022Las autoridades de Alemania y de Polonia investigan en paralelo el alcance y el detonante de la catástrofe ecológica revelada por la muerte masiva de toneladas de peces en el río Oder, fronterizo entre ambos países. Los primeros análisis realizados en Brandeburgo, el estado federado del este alemán que envuelve Berlín, detectaron sustancias tóxicas que podrían proceder de vertidos de mercurio, presumiblemente procedentes de una planta industrial polaca.
La ministra alemana de Medio Ambiente, Steffi Lemke, exigió este sábado (13.08.2022) una investigación exhaustiva para determinar las causas de este "desastre medioambiental", mientras en Polonia, el gobierno populista de derecha recibió críticas por no haber actuado antes. El primer ministro polaco, Mateusz Morawiecki, aseguró que tuvo conocimiento del incidente "el 9 o 10 de agosto". "Es evidente que lo supe muy tarde", reconoció.
Los análisis realizados en Alemania no son aún concluyentes respecto al grado de toxicidad de las aguas y el eventual riesgo para el ecosistema, pero desde organizaciones medioambientales califican la situación como una catástrofe. El hecho de que los primeros indicios del desastre salieran a la luz hace tres días en la ribera polaca y no fueran comunicados a Berlín tiene molestas a las autoridades alemanas.
Los peces, apenas la punta del iceberg
De pie a orillas del Óder, Michel Tautenhahn, jefe adjunto del parque nacional del valle del Bajo Óder, mira consternado el curso de agua. "Estamos en el lado alemán. Tenemos peces muertos por todos lados", dice a la agencia AFP. "Estoy profundamente conmocionado. Tengo la impresión de ver décadas de trabajo arruinadas ", lamenta. Y advierte que las toneladas de peces muertos son solo "la parte visible del iceberg”.
Las autoridades alemanas informaron de indicios de niveles extremadamente altos de mercurio, algo que la investigación deberá confirmar. "Si es mercurio, se quedará allí durante largo tiempo", dice Tautenhahn, recordando que este metal no se desintegra y puede permanecer muchos años en los sedimentos. Por lo pronto, Polonia adoptó las primeras medidas, cesando al responsable nacional de la Gestión de las Aguas y a un inspector de protección ambiental.
Morawiecki, en tanto, garantizó este sábado que se hará "todo lo posible" para minimizar los daños y paliar las pérdidas, así como para identificar a los responsables de lo ocurrido.
DZC (EFE, AFP)