Alemania y su postura hacia China: ¿socio o rival?
18 de abril de 2023El comunicado final de los ministros de Exteriores de los siete Estados que forman el G7 fue del agrado de la ministra de Exteriores de Alemania, Annalena Baerbock, del partido Los Verdes. Estados Unidos, Francia, Gran Bretaña, Canadá, Japón, Italia y Alemania instaron a China a cumplir con las normas internacionales: "Recordamos a China la necesidad de defender los propósitos y principios de la Carta de las Naciones Unidas y abstenerse de amenazas, coerción, intimidación o amenazas de violencia".
Un encuentro delicado en China
Baerbock apuesta, desde hace tiempo, por una postura más bien crítica hacia China. Para la jefa de la diplomacia alemana, la reunión en Karuizawa, Japón, marcó el final de un viaje de seis días por China, Corea del Sur y Japón.
En China, la ministra criticó la situación de los derechos humanos en el país. Su homólogo chino, Qin Gang, lo desmintió con frialdad. Baerbock también mencionó sin tapujos las amenazas a Taiwán.
El conflicto con Taiwán
China considera que la isla democrática de Taiwán le pertenece yamenaza cada vez más a Taiwán, por ejemplo, con maniobras militares en el mar entre ambos países. Qin Gang, sin nombrar directamente a Alemania o a la ministra dijo: "Lo que menos necesita China son maestros de Occidente". Palabras más que claras de la segunda potencia económica mundial.
Aún no hay concepto del Gobierno federal
El viaje de la ministra y su posterior reunión con los miembros del G7 en Japón han demostrado que Baerbock habla con claridad cuando se trata de una República Popular China cada vez más fuerte y autócrata.
El Gobierno alemán, sin embargo, aún no ha logrado poner de acuerdo a todos los socios de coalición sobre la relación a futuro con el gigante asiático. ¿Cambio a través del comercio? ¿China como socio, competidor o rival?
Baerbock dejó bien claro en Asia que no se debe "hacer la vista gorda" cuando se trata de infringir el derecho internacional, especialmente cuando se trata de Taiwán. En Karuizawa, la ministra reiteró que los socios de Alemania en la región "ya perciben muy de cerca cómo China quiere reemplazar cada vez más, con sus propias reglas, las reglas internacionales existentes y, en general, vinculantes". Baerbock quiere adoptar una postura clara al respecto.
Muchos conceptos, ningún acuerdo
Pero, ¿cómo sería tal postura? Aparentemente no hay acuerdo sobre ello en el Gobierno alemán, una coalición de socialdemócratas, verdes y liberales. A mediados de noviembre de 2022, se conocieron los primeros planteamientos de la estrategia hacia China del Ministerio de Exteriores germanos: reducir con rapidez la dependencia económica de China, país que es cada vez más competidor y rival sistémico, así como detener las importaciones de regiones donde se producen "violaciones masivas de derechos humanos", como las regiones uigures, por ejemplo.
Macron tiene otra visión
En otros países europeos también se debate sobre el camino correcto a seguir con China. La reciente visita a China del presidente francés, Emmanuel Macron, causó mucho revuelo. Al referirse a las tensiones entre Washington y Pekín por Taiwán, Macron dijo que sería bueno que Europa "evitara crisis que no son las nuestras". Europa debe tener cuidado de no "convertirse en un vasallo" de Estados Unidos, advirtió.
En Alemania, en cambio, incluso la oposición apoya la postura crítica de la ministra alemana hacia China. El encuentro con los ministros de Exteriores del G7 fue una reunión preparatoria para la cumbre del G7 del 19 al 21 de mayo en Hiroshima, Japón. Allí también participará el canciller alemán, Olaf Scholz, pero aún no se sabe si este llegará al país asiático con una estrategia más clara de su Gobierno en relación con China.
(rmr/rml)