Alemania bloqueará acceso a pornografía infantil en Internet
17 de abril de 2009Este viernes 17 de abril de 2009, la Oficina Federal de Policía Criminal (BKA), por sus siglas en alemán, firmó acuerdos con los cinco proveedores de servicio de Internet más importantes de Alemania para impedir que sus clientes tengan acceso a páginas de Internet que contengan pornografía infantil. Si todo marcha como ha sido planeado, el Consejo de Ministros aprobaría un marco legal válido para todas las empresas proveedoras este miércoles 22 de abril, con miras a regular la censura de material ilegal en Internet a largo plazo.
El bloqueo está por comenzar
De ahora en adelante y diariamente, la BKA –un órgano al servicio del Ministerio de Interiores– hará listas de hasta 1.000 páginas web con pornografía infantil para que Alice/Hansenet, Deutsche Telekom, Kabel Deutschland, Telefonica/O2 y Vodafone/Arcor se encarguen de bloquearlas. Los usuarios que intenten entrar a dichas páginas se encontrarán con un aviso estandarizado en el que se advierte que el acceso está prohibido.
El acto de bloquear una página virtual no es oneroso y, técnicamente hablando, no supone problema alguno para las compañías proveedoras de Internet. Hasta hace pocos meses, éstas sólo temían tener que dar la cara en el caso de que una página con contenidos absolutamente legales fuera censurada por error; pero los ministerios involucrados en este proyecto aseguraron que sería el Estado quien asumiría la responsabilidad política por cualquier eventualidad de esa naturaleza.
La política en acción
A principios de 2009, las compañías en cuestión aceptaron el llamado de los ministerios de la Familia, de Interiores y de Economía y Tecnología a comprometerse con esta iniciativa, inspirada por un sistema empleado en Noruega desde 2004 para filtrar las páginas web con pornografía infantil. La celeridad con que esta estrategia ha sido puesta en marcha se debería más a la concordia política que existe entre los ministros que la respaldan –ellos pertenecen a uno u otro de los partidos más conservadores, la Unión Social Cristiana de Baviera (CSU) y la Unión Demócrata Cristiana de Alemania (CDU)– que a la unanimidad con que su posible efectividad ha sido reconocida en el Parlamento alemán.
Para la ministra de la Familia, Ursula von der Leyen (CDU), esta iniciativa en contra de la pornografía infantil en Internet sería la última en llevar su firma antes de las elecciones de septiembre y tiene un considerable valor simbólico. Pero en el Partido Social Demócrata de Alemania (SPD), en los otros partidos de oposición y –más relevante aún– entre los especialistas que se han ocupado del tema se sigue percibiendo esta medida con algo más que escepticismo.
Voces opositoras
Así como existe una masa crítica que condena la inefectividad de la “guerra contra el narcotráfico” por estar dirigida casi exclusivamente contra los productores de drogas en el Tercer Mundo, existe también una corriente de opinión que cuestiona la aplicación de ciertas medidas para combatir la industria de la pornografía infantil que pecan de simplistas al concentrar su atención en los consumidores.
Anna Fischhaber comentaba recientemente en el diario alemán Süddeutsche Zeitung que una serie de bloggers se ha dedicado en las últimas semanas a revisar y evaluar las listas de páginas web bloqueadas en otras partes del mundo. Ellos habrían llegado a la conclusión de que la mayoría de los sitios que aparecen en esas listas son operados desde países en donde sería fácil eliminar contenidos pornográficos ilegales de la red de redes. Eso contradice, según Fischhaber, los argumentos del gobierno alemán según los cuales el bloqueo electrónico es imprescindible porque la pornografía infantil proviene de países en donde la misma no está penalizada.
Un tópico delicado
“La mayoría de esas páginas son operadas desde los Estados Unidos y la Unión Europea, desde países con los que Alemania tiene acuerdos de cooperación judicial. Bastaría una llamada telefónica para sacarlas de la Red. Y cuando se toman acciones legales contra distribuidores de pornografía infantil, quizás también se puede atrapar a los productores”, agrega Christian Bahls, fundador de la Asociación de Víctimas de Violación Contra el Bloqueo de Páginas Web, en entrevista con el Süddeutsche Zeitung.
El de la pornografía infantil es un fenómeno complejo que tiende a ser abordado con cautelosos lugares comunes y con más emoción que razón en el debate público. Después de todo, la tergiversación de un comentario hecho al respecto puede costarle la reputación social o la carrera profesional a cualquiera, no solamente a los políticos. De eso está consciente Christian Bahls cuando comenta en su blog “mogis.wordpress.com”: “Creo que necesitamos sostener una discusión sincera y dejar claro que el fin no justifica los medios. Y menos cuando se trata del abuso de niños. Pero nadie se atreve a hacerlo. ¿Quién quiere ser tildado de pornógrafo, pedófilo, o ser difamado como simpatizante?”
Autor: Evan Romero-Castillo
Editor: José Ospina-Valencia