Alemania: acusados del robo en la Bóveda Verde al banquillo
27 de enero de 2022Fue uno de los robos más espectaculares y audaces de las últimas décadas en Alemania, y una tragedia no solo para la ciudad cultural de Dresde, sino también para la memoria cultural de toda la región de Sajonia: en la madrugada del 25 de noviembre de 2019, varios ladrones sustrajeron numerosos tesoros de la histórica Bóveda Verde. La colección de joyas del museo, que es uno de los más famosos del país, pertenece a las colecciones estatales de arte de Dresde.
Un botín de inmenso valor
Los autores del robo ingresaron a la Bóveda Verde a través de una ventana enrejada. La brutalidad de los ladrones, que aparentemente actuaron sin ningún respeto por el arte, fue particularmente sorprendente.
En cuestión de minutos, rompieron una vitrina con un hacha y robaron una docena de piezas de tres conjuntos históricos de joyería de la época de Augusto II de Polonia, apodado Augusto el Fuerte (1670-1733). Entre ellos, estaba el "Sajón blanco", un diamante blanco de 48 quilates.
Clan berlinés en la mira
Tras un año de investigaciones, el caso de la "Bóveda Verde" dio un giro a mediados de noviembre de 2020: la comisión especial, formada tras el robo, señaló a los miembros del clan Remmo, de Berlín, después de una inmensa redada con unos 1.600 policías.
Tres miembros del clan, sospechosos directos del crimen, fueron detenidos. Poco después, un par de hermanos gemelos, que también pertenecen al clan, fueron arrestados por la policía. El sexto y último sospechoso, Ahmed Remmo, fue finalmente detenido el 19 de agosto de 2021. Ahmed ya tuvo que responder por el robo al Museo Bode de Berlín en 2020, y fue condenado.
El paradero del botín es aún incierto
El paradero de las joyas, de un valor incalculable para la historia del arte, sigue sin aclararse; incluso los supuestos rastros no han llevado a nada hasta ahora. Los conjuntos de joyas eran una de las atracciones especiales de la Bóveda Verde. Entre las piezas robadas figuran joyas de diamantes de la realeza, una estrella de pecho de la Orden del Águila Blanca de Polonia y una espada con diamantes.
En una entrevista concedida a DW poco después del robo, la historiadora del arte Ulli Seegers expresó su conmoción: "Al principio apenas podía creerlo, porque no hacía mucho tiempo que la Bóveda Verde había sido restaurada con mucho esfuerzo. Era una perla, un tesoro del patrimonio cultural mundial". Como historiadora de arte, tenía el corazón roto. "Esto es realmente una inmensa pérdida, un tesoro que probablemente se haya perdido irremediablemente", lamentó.
Cuando se le preguntó si las joyas, que aún no han sido recuperadas, podrían recuperarse, Seegers se mostró pesimista: "Basándome en mi experiencia en el mercado internacional del arte, en el ámbito del crímen artístico, la probabilidad de que estos conjuntos de joyas aparezcan tal y como estaban, es bastante baja", comentó. Es de temer, dijo Seegers en su momento, que los mafiosos destruyan este tesoro cultural único y lo desmonten en partes para luego venderlo ilegalmente.
¿Qué seguridad tienen los museos alemanes?
Inmediatamente después del hecho, surgieron muchas interrogantes sobre la seguridad en los museos alemanes y sobre quién sería responsable de la pérdida de los tesoros de arte. Seegers había declarado a DW que estaba "segura de que el tesoro cumplía con las normas internacionales de seguridad". Sin embargo, aparentemente no fueron suficientes, de lo contrario, este robo no habría ocurrido.
El robo de Dresde fue "único, irrecuperable y una gran pérdida para la humanidad", afirmó el experto en seguros Stephan Zilkens en conversación con DW. La Bóveda Verde debería haberse asegurado en caso de una pérdida total, según el experto. Si las joyas pudieran venderse sin restricciones, estimó Zilkens, el resultado en una subasta sería entre unos 150 y 200 millones de euros.
La Bóveda Verde de Dresde es uno de los museos más famosos de Alemania. El edificio histórico es del siglo XVI. En 1723, el elector sajón y rey polaco Augusto el Fuerte, construyó allí una cámara del tesoro. Desde 2006, se encuentra de nuevo en el palacio residencial de Dresde, después de haber sido sometido a una amplia renovación y restauración.
(ct/rml)