Al mal tiempo buena cara
5 de noviembre de 2002
Ahora es Oliver Kahn quien se enfrenta a la directiva del club. El capitán del Bayern de Múnich culpó de la crisis que vive su equipo a los dos principales directivos, Franz Beckenbauer y Karlheinz Rummenigge, por haber intentado "cambiar la filosofía futbolística del club". Kahn, además, dio su claro respaldo, en nombre de todo el equipo, al entrenador Ottmar Hitzfeld.
Invertir en el futuro
Al presidente del Bayern de Múnich, Franz Beckenbauer, no parecen preocuparle demasiado estas críticas, pues está convencido de que la eliminación de su equipo en las competiciones europeas para esta temporada puede significar una oportunidad para dar paso a los jóvenes jugadores del equipo. Hay que apoyar a las jóvenes esperanzas con las que en un futuro se logrará conquistar nuevamente el campo europeo. La situación que está atravesando el equipo puede ser buena para dar una oportunidad a los jugadores más jóvenes en los que se invertirá cada año dos millones de euros para su formación.
Una no es ninguna
El Bayern, campeón de Europa hace dos años cuando derrotó en la tanda de penaltis al Valencia, partía como uno de los conjuntos favoritos para optar a todos los títulos esta temporada . El equipo que dirige Ottmar Hitzfeld se había reforzado para esta campaña con las incorporaciones de Michael Ballack y el brasileño Zé Roberto, ambos procedentes del Bayer Leverkusen, y del centrocampista del Herta de Berlín Sebastian Deisler, que todavía no ha podido debutar debido a una grave lesión de rodilla que sufrió con la selección antes del Mundial de Corea-Japón.
Metas claras
Los 25 millones de euros invertidos por el Bayern este año apenas han tenido repercusión en el aspecto deportivo ya que el equipo bávaro ha ofrecido una actuación bochornosa en la Liga de Campeones, según lo ha dicho el propio Beckenbauer. De ahí la importancia en las millonarias inversiones en los jóvenes del futuro que deberán lavar la imagen del equipo ya el año que viene y que deberán ayudar a que el Bayern de Múnich logre un lugar puntero que sirva para olvidar lo que ha pasado esta temporada.