¡¡Adiós amigos!! España se despide de Alemania
27 de junio de 2006
Era la gran oportunidad para que España se luciese en un mundial con las grandes esperanzas puestas en el joven equipo de Luis Aragonés. Tanto comentaristas como aficionados estaban sorprendidos con el magistral fútbol de la selección española en la fase de grupos, donde venció por 4:0 contra Ucrania y 3:1 contra Túnez. Sin embargo, la historia se repitió y España se despide de la Copa de Alemania.
Los ibéricos comenzaron el partido con ganas jugando al toque en el centro del campo e intentando penetrar en las filas defensivas galas. Pero la alineación de Doménech no lo iba a poner fácil y todas las ocasiones se quedaban a las puertas del área.
Con suerte llegó en primer tanto español a raíz de un penalti (m.26), que Rosetti señaló a Thuram por su entrada a Pablo en el área. Villa se encargó de transformar el tiró con un disparo ajustado al poste derecho que Barthez no pudo detener.
La alegría de la afición española iba a durar poco cuando Francia consiguió saltarse a la defensa española, muy adelantada durante todo el partido para provocar el fuera de juego, y Ribery llegó solo al área. El francés dejó a casillas en el suelo y marcó el tanto a puerta vacía (m. 41).
Con el empate en el marcador, ambas selecciones salieron al descanso con miedo a cualquier fallo impidiendo un juego fluido. Aragonés comenzó a reordenar su escuadra con dos cambios sorpresa en el minuto 53. Joaquín entró por David Villa y el capitán Raúl, que cumplía años, salió también del terreno de juego dejando lugar para Luis García. La estrella del Madrid no entró al juego en la primera parte y Aragonés lo relegó al banquillo como en todos los duelos importantes de España en el Mundial 2006.
El partido siguió sin ritmo con mucho juego en el centro del campo pero pocas ocasiones en las respectivas áreas. Hubiese sido necesario un fútbol más agresivo para que los muchachos de Aragonés consiguiesen adelantar el marcador.
Francia por el contrario esperaba paciente su oportunidad hasta que logró el tiro de gracia en el minuto 82 con un gol de Patrick Vieira, tras el saque de Zidane de una dudosa falta que señaló Rossetti.
Los cuartos estaban cada vez más lejos y la ilusión española caía aunque seguían insistentemente buscando la puerta de Barthez. Para rematar la trágica jornada de la armada española, Zidane volvió a aprovechar de nuevo la posición adelantada de la defensa española llegando al área y disparando solo ante Casillas. El 3:1 final subía al marcador a un minuto del final del partido.
En definitiva, la historia se repite y España sigue sin llegar muy lejos en un campeonato del mundo. Por mala suerte o mal fútbol, el camino a la copa se tuerce para los españoles en cada convocatoria mundialista. Habrá que esperar cuatro años para que la suerte juegue del lado de una de las selecciones más jóvenes clasificadas para este campeonato.