Acuerdo sobre refugiados, un primer paso para la UE
22 de septiembre de 2015A solo tres kilómetros de donde se reúnen los 28 ministros del Interior de los países de la Unión Europea (UE), uno puede hacerse una impresión de primera mano de lo que significa la crisis de los refugiados. Frente a las oficinas de migración en Bruselas acampan desde hace semanas cera de 800 refugiados, entre grandes edificios y un pequeño parque. Entre tanto cuentan con tiendas de campaña donadas por la Cruz Roja; además hay agua y sanitarios improvisados. Las condiciones de vida no son tan miserables como en Grecia o en Croacia, pero no dejan de sorprender a los visitantes que llegan a la capital de Europa.
Sin embargo, los ministros no tienen tiempo para visitar a ese lugar: debían resolver una disputa interna por las cuotas de refugiados para cada país. Al final, la mayoría se impuso a la República Checa, Eslovaquia, Hungría y Rumania. Las distribución de 120.000 refugiados provenientes de Grecia o Italia se producirá contra la voluntad de cuatro países. Finlandia se abstuvo de votar.
El presidente del Consejo de ministros del Interior, el luxemburgués Jean-Asselborn, consideró que la decisión sin unanimidad era necesaria: “Si no decidíamos nada, se nos hubiera tomado por faltos de unidad y de credibilidad”, dijo.
En el documento final, de hecho, no se habla de cuotas sino de cifras absolutas. Alemania debe recibir a 31.000 refugiados, la República Checa a 3.000 y Eslovaquia a 1.500. Asselborn aseguró que pronto habrá un acuerdo sobre cuotas permanentes.
Asilo sin destino elegido
También debe precisarse cómo funcionará exactamente la distribución de los refugiados. El ministro húngaro del Interior manifestó dudas en cuanto a que pueda enviarse a refugiados a países a los que no desean ir. El ministro alemán del Interior hizo énfasis en que “las personas que sean distribuidas en Europa no puedan elegir a qué país van. Deberían permanecer en el país al cual serán enviados. Hoy acordamos que en caso de no permanezcan en el destino al cual fueron designados, los enviaremos de vuelta sin dilación”.
Una condición para mejorar la distribución de los refugiados es que existan centros adecuados de admisión en Grecia e Italia. Otra es que los refugiados y solicitantes de asilo realmente acudan a dichos centros. Pero si viajan de manera desordenada, como en gran parte ocurre actualmente, el registro es prácticamente imposible. Es por eso que se necesita una mayor vigilancia en las fronteras de la UE, dijo la ministra austríaca, Johanna Mikl-Leitner.
Un primer paso
A su colega alemán le queda claro que los acuerdos iniciales sobre la distribución de refugiados en Europa es un primer paso. “No se trata solamente de distribuir a quienes necesitan protección. Necesitamos soluciones más permanentes. Entre ellas está la limitación del flujo migratorio hacia Europa, así como la ayuda a los países en los cuales se encuentran los campamentos de refugiados. Es necesaria una cooperación con Turquía, y el retorno de las personas que no requieren protección”, dijo Thomas de Maiziere en Bruselas.
Así, contener la ola de refugiados funcionará, según los ministros europeos del Interior, en la medida que se combata las causas que originan los desplazamientos en Siria, Afganistán y Eritrea. Las guerras en Cercano Oriente y las dictaduras en África no se superarán de la noche a la mañana. Por eso, los jefes de Estado y de Gobierno se ocuparán durante la cumbre urgente sobre los refugiados, a celebrarse este miércoles, de los aspectos de política exterior relacionados con este drama humano.