China: activista taiwanés condenado a cinco años de prisión
28 de noviembre de 2017Un tribunal chino condenó este martes (28.11.2017) a cinco años de cárcel al activista y profesor taiwanés por "subversión del poder del Estado" a través de opiniones y comentarios emitidos estando fuera del territorio chino.
La condena fue dictada por el tribunal intermedio de Yueyang (provincia de Hunan), y Lee, de 42 años, manifestó que no apelaría esa decisión, informaron medios taiwaneses desplazados a la sede judicial.
Lee, exempleado del gobernante Partido Demócrata Progresista (PDP), es un profesor en el Colegio Universitario Comunitario Wenshan de Taipei y voluntario de la ONG Covenants Watch.
La sentencia supone el primer caso de extraterritorialidad en una condena a críticos de China, el primer taiwanés condenado por subversión contra el poder de Pekín y el primer ciudadano no chino miembro de una ONG procesado en este país tras la nueva ley de 2016 sobre estos grupos.
Las autoridades de Taipei condenaron de inmediato el veredicto y llamaron al Gobierno chino a dejar en libertad a Lee tan pronto como sea posible. "¡No podemos aceptar esto!”, dijo el portavoz presidencial taiwanés Alez Huang en un comunicado, en el que enfatizó que el caso daña las relaciones entre las partes.
"En Taiwán los hechos que se imputan a Lee no son delito y China lo condena por hechos registrados fuera de su territorio", dijo a Efe la secretaria ejecutiva de la Asociación pro Derechos Humanos de Taiwán, Eeling Chiu.
El juicio también provocó críticas internacionales y el Parlamento Europeo exigió en julio en una resolución la puesta en libertad del activista.
Lee desapareció el 19 de marzo, tras ingresar en China procedente de Macao en un viaje privado, sin que hasta el 29 de marzo se supiese de su detención y no hubo detalles sobre su paradero hasta mayo, cuando se hicieron públicos los cargos de subversión del poder estatal.
El 11 de septiembre fue juzgado en la ciudad de Yueyang, un proceso al que asistieron su esposa y su madre. Durante el juicio, el profesor de educación superior y activista por los derechos humanos, admitió haber publicado artículos y haber participado en actividades que "difaman y atacan maliciosamente al Partido Comunista Chino, al Gobierno chino y el sistema político actual chino".
Su esposa, Lee Ching-yu, denunció en aquel momento que su marido se había declarado culpable porque estaba siendo presionado por Pekín.
El caso despertó la atención internacional, con pronunciamientos en las Naciones Unidas, el Congreso de Estados Unidos y el Parlamento Europeo, por ser el primero contra un miembro de una organización no gubernamental en China, tras la aprobación en 2016 de una ley sobre el funcionamiento de las ONGs en este país.
El caso se ha seguido intensamente en Taiwán como una forma de medir la política de Pekín hacia la isla, la cual se ha endurecido desde la llegada al poder de la presidenta taiwanesa Tsai Ing-wen, del independentista PDP.
Desde el final de la guerra civil china en 1949, la situación de Taiwan es un foco de tensiones en Asia. En 1949 las tropas del Kuomintang (el Partido Nacionalista Chino) huyeron a la isla de Taiwan, que se denomina "República China" y se considera una democracia independiente.
China es el principal socio comercial de Taiwan, mientras que la isla es uno de los principales inversores en la China continental.
JCG (EFE, dpa)