La semana en breve
El Parlamento alemán aprobó con amplia mayoría el incremento en 211.000 millones, y eso alivió un poco la tensión en la eurozona y en las filas de la coalición de gobierno de Angela Merkel. En otro escenario, el ministro de Exteriores alemán, Guido Westerwelle, urgió a palestinos e israelíes a reanudar las conversaciones de paz.
El presidente de la Comisión Europea, José Manuel Barroso, rechazó la creación de un gobierno financiero europeo, apoyó los eurobonos y apeló a que la banca europea contribuya a paliar la crisis pagando un impuesto a las transacciones financieras, pero advirtió no esperar soluciones demasiado rápidas.
"La Comisión Europea también está considerando crear un amplio mecanismo de garantías para ayudar a los bancos a contribuir con la economía real. Todo eso representa un gran apoyo a la recuperación de Grecia, y Grecia tendrá que proveer resultados concretos. Debe romper con prácticas contraproducentes y a resistir a intereses creados. Pero debemos ser claros: no se trata de una carrera a toda velocidad, sino de una maratón."
El voto sobre la expansión del Fondo Europeo de Estabilización Financiera en el Parlamento alemán fue crucial, no sólo para la eurozona, sino también para la canciller alemana, en cuyo gobierno de coalición había sido criticada la medida. Alemania contribuye con 211.000 millones de los 440.000 millones que tendría el fondo a disposición – si es aprobado por toda la eurozona- para ayudar a países endeudados. Merkel, por su parte, defendió continuamente al FEEF y al euro. En el debate parlamentario, el diputado socialdemócrata y ex ministro de Finanzas Peer Steinbrück se refirió a tales consecuencias.
"Su frase, Sra. Merkel: ‘Si fracasa el euro, fracasa Europa', no es incorrecta, porque todos somos concientes de que, en el caso de que el euro fracase, la integración europea retrocederá dos décadas y una renacionalización monetaria tendrá como consecuencia, sin duda, un renacimiento de los nacionalismos."
En cuanto al consenso de todos los países de la eurozona, necesario para una ampliación del Fondo Europeo de Estabilidad Financiera, la canciller alemana había vuelto a remarcar su importancia vital para la eurozona, antes de la votación, durante un encuentro con el primer ministro griego y representantes del sector industrial en Berlín.
"Lo más importante –y Alemania prestará toda la ayuda necesaria para que sea posible- es que Grecia recupere la confianza, que podamos salir de esta situación que provoca temor y que, mes tras mes, genera noticias terroríficas, para lograr que los mercados entiendan que Grecia está yendo por el buen camino."
Por fin, el jueves 29 de septiembre, la mayoría parlamentaria votó a favor de la ampliación del paquete de rescate de la eurozona. Pero con el ‘sí' del Parlamento no acaba la tarea ciclópea de afianzar la alicaída confianza de los mercados en Europa, ni la de proteger a otros países para que no caigan en el mismo pozo en el que se encuentra Grecia. También se prevé la creación de un impuesto a las transacciones financieras de los grandes bancos.
En otro orden de cosas, en cuanto a política exterior alemana en Cercano Oriente, el canciller alemán de Exteriores, Guido Westerwelle, apeló en su discurso ante la Asamblea General de las Naciones Unidas a reanudar de inmediato las negociaciones, lo que podría interpretarse como una negativa a votar a favor del reconocimiento de un Estado Palestino en el Consejo de Seguridad de la ONU.
"Por eso, apelo a ambas partes, a los palestinos y a los israelíes, a reanudar de inmediato las negociaciones de paz. Tanto Israel como Palestina reafirmaron su voluntad de lograr la paz a través de negociaciones. Ahora, todo depende de transformar la energía y la presión vivida en estos días en un proceso constructivo."
Autora: Cristina Papaleo
Editor: Enrique López